Nuevas zonas verdes, avenidas, rotondas y, principalmente, una profunda transformación de una zona degradada en un barrio donde poder vivir. Los trabajos del nuevo residencial Río Tinto están muy cerca de finalizar, ya que solo resta señalizar la calzada junto al puente del paso inferior y dar los últimos remates para que la prolongación de la avenida de la Constitución se pueda abrir hasta el enlace con la carretera de Badajoz. Este hecho se producirá previsiblemente antes de terminar este mes y facilitará el acceso a los edificios industriales del Embarcadero y el Garaje 2.0, destinado a empresas.