La junta directiva de la Asociación de Vecinos de Nuevo Cáceres ha acordado devolver las llaves de la sede al ayuntamiento ante la imposibilidad de afrontar los gastos del inmueble, según confirmó a este diario su presidente, José María Tovar. "No tenemos ingresos para mantenerla", dijo.

El colectivo tiene paralizada la concesión de la subvención del 2005 por irregularidades detectadas en la justificación de la ayuda que se concedió el año anterior. Sin ayudas, la asociación no puede hacer frente al mantenimiento de la sede.

JUSTIFICACION DEL 2004 El problema surgió con el destino que se dio a la ayuda recibida en el 2004 para las migas navideñas. Como el colectivo tiene un acuerdo para esta celebración con un bar que se las ofrece gratis, la actual junta directiva --"por desconocimiento", según Tovar-- invirtió el dinero en material deportivo para el equipo del barrio, en un ordenador para la sede y el teléfono.

Al justificar el gasto en estos conceptos y comprobar que no se había destinado a las migas, el ayuntamiento paralizó la concesión de la ayuda del 2005 a la espera de una resolución de la alcaldía, con la que se podría descongelar la situación.

Este problema económico ha causado también desavenencias entre el presidente vecinal y el concejal de Participación Ciudadana, José Luis Sánchez, quien, según Tovar, le instó a dimitir ante la mala gestión del colectivo vecinal. La falta de recursos ha llevado incluso a suspender las migas de este año.