Más de la mitad de las líneas del servicio de autobuses urbanos sufrirán alguna modificación cuando en abril se inicie la nueva concesión del transporte público. Esta es la propuesta que se recoge en el borrador del pliego técnico que se llevó a la última reunión del consejo de Participación. Este pliego, ya con su redacción definitiva, será parte de la documentación del concurso que se convocará próximamente. Las principales modificaciones que se introducirían en el servicio de autobuses afectan a las líneas 8 y 9, además se propone la creación de un nuevo trayecto, la línea 10, que partiendo de la avenida de Hernán Cortés tendría paradas en los sectores de Montesol y Cáceres el Viejo.

En la propuesta del pliego técnico también se plantea la posibilidad de la implantación de un billete único o de transbordo, que es una de las reivindicaciones que la agrupación de asociaciones de vecinos ha expuesto desde que el ayuntamiento empezó a recabar su opinión para el nuevo contrato del servicio.

En el borrador del pliego técnico se recoge que la empresa que resulte adjudicataria tendrá que redactar en un tiempo máximo de quince meses un plan director. Dentro de este análisis tendrá que realizar un estudio de la repercusión económica de la utilización de un billete o tarjeta con derecho a transbordo entre líneas y dentro de un tiempo determinado. Este análisis se tendrá que remitir a los servicios técnicos del ayuntamiento para su estudio antes que la corporación local decida si aplica esta ampliación de la tarifa.

Otra de las condiciones que figura en la propuesta de pliego es que el servicio debe iniciarse con al menos 35 vehículos, de los que cuatro quedan en reserva para necesidades o urgencias que se produzcan. También se propone que en las paradas de mayor afluencia se tendrán que instalar terminales exteriores, no integrados en las marquesinas, con banderola de información a los usuarios con tecnología led, en la que se ofrezcan datos visuales y sonoros.

VIDA UTIL Dentro de las propuestas también destaca que la vida útil, y la amortización de su coste por parte del ayuntamiento, de los nuevos vehículos será de trece años, dos menos que el periodo ahora en vigor. Cuando el próximo mes de abril se inicie la nueva concesión quedará pendiente el pago de 1.269.514 euros de la amortización y financiación de una decena de autobuses matriculados entre 2003 y 2007.

El concurso que convocará el consistorio en las próximas semanas será el tercero que se haga para la concesión de la gestión del servicio de autobuses. Los dos anteriores se adjudicaron a la empresa Autobuses Urbanos del Sur (Busursa), que no completó el segundo periodo de concesión, que es el que acaba en abril, por los problemas económicos de esta compañía, que pertenecía al grupo empresarial del ex presidente de la Ceoe, Gerardo Díaz Ferrán. La empresa Subus, que pertenece al grupo Vectalia, es la adjudicataria del servicio desde 2012. Esta empresa se ha hecho recientemente con la gestión del servicio de autobuses de Mérida.

El servicio contará cuando entre en vigor el nuevo contrato con 15 líneas, según se fija en la propuesta de pliego, son las mismas que hay en la actualidad, salvo por la diferencia de que el servicio nocturno se suprime definitivamente y se crea la nueva línea 10.

El autobús es un servicio deficitario, los costes están por encima de los ingresos por tarifa y publicidad. El ayuntamiento abona la diferencia a la empresa concesionaria. En 2012 tuvo un coste de 6.954.519 euros, mientras que los ingresos por la tarifa fueron 3.066.240. El déficit fue de 4 millones, pese a que en 2012 ya se aplicaron medidas como la subida de la tarifa, en vigor desde noviembre, y ajustes en líneas. A esto se suma la pérdida de viajeros: las principales líneas han perdido un tercio de sus viajeros en la última década.