Hoy es el día. Si nada lo ha vuelto a imposibilitar, desde primera hora se habrán iniciado las obras del ensanche de las calles Mira al Río y San Roque y de reordenación de dos de los enclaves más significativos del casco viejo: puente Concejo y la plaza de San Francisco. Es la obra más compleja que se hace en Cáceres en los últimos años porque afecta a la única vía de conexión de todo el este urbano, un eje por donde circulan cinco mil vehículos al día. El concejal delegado de Tráfico, Santos Parra, aconsejó ayer que se utilice la ronda norte como alternativa a Mira al Río. "Aunque la demora sea de entre 4 y 5 minutos, merece la pena", manifestó el concejal.

Parra, al igual que el viernes hizo el concejal Javier Castellano, explicó las características de una intervención de la que dijo que "hace años que no se ha hecho una actuación con una influencia en el tráfico tan grande". Los trabajos se adjudicaron hace un año y medio a Senpa y Aglosan y la inversión es de 1,6 millones. Ayer se realizaron las primeras intervenciones al ampliarse el vial que une Camino Llano con Fuente Nueva, Damas y San Ildefonso, que se convertirá en uno de los principales accesos al sur y este del casco viejo. Su ensanche obligó a retirar una palmera y mobiliario urbano.

Las obras de Mira al Río también afectarán al trayecto de las líneas 6, 7 y 8 del servicio municipal de transporte público. La 7 y 8 se desviarán por el Rodeo y se suprimirá la parada del puente de San Francisco, mientras que en la línea 6 se eliminarán todas las paradas del recorrido de vuelta y habrá nuevas paradas en las avenidas de las Delicias, junto a la plaza de toros, y Múltiples.