Ser de Málaga la persona que supuestamente facilitó el falso título de médico con el que el mentalista cacereño Juan Carlos Cofrades Santillana ejerció sin serlo, y que este no solo ejerció en Cáceres, sino también en localidades de otras provincias, como Huelva, motivó que la causa ´circulara´ de unos juzgados a otros hasta decidirse que el juicio se celebrara en Cáceres.

Resuelta esta cuestión, el juicio, que habrá de celebrarse en el Juzgado de lo Penal número 2 de la ciudad, se fijó para el día de ayer, 30 de junio, pero se ha producido una nueva demora. En esta ocasión el motivo ha sido un olvido, el hecho de que a una de las acusaciones particulares --actúan como tan los colegios de médicos de Cáceres y de Huelva-- en esta causa no se le había notificado la fecha de celebración de la vista oral. Este hecho obligó a suspenderlo y aplazarlo a una nueva fecha, que en principio ha quedado fijada para el 22 de septiembre.

De nuevo se retrasa la resolución de un proceso judicial que se remonta a hace casi tres años. Fue concretamente el 22 de octubre del 2008 cuando se hacía público esta caso de intrusismo profesional que después de verano sentará en el banquillo de los acusados, además de a Santillana, a José Lozano Márquez, un vecino de Málaga al que se acusa de colaborar con él en la obtención del título falso.

Al primero el Ministerio Fiscal le imputa un delito continuado de falsedad en documento público y oficial, y un delito de intrusismo con atribución pública de la cualidad profesional, en su caso de médico, y solicita para él una condena de 5 años de prisión. Al segundo le imputa un delito continuado de falsedad en documento público y oficial, por el que pide para él 3 años de prisión.

En su escrito de acusación, el Ministerio Fiscal indica que "en fecha no determinada, pero anterior al año 2007", Santillana se puso en contacto con el otro imputado "para adquirir documentación con apariencia verosímil e idónea para certificar que había cursado los estudios necesarios para ser licenciado en Medicina, a pesar de que ambos sabían que eso era incierto". Y ambos, se añade, "confeccionaron un documento, cuyo último sello tiene fecha de 7 de marzo del 2006, que pretendía acreditar al imputado Santillana como Licenciado en Medicina y Cirugía por la Universidad de San Martín de Porres de Lima, en Perú", y también "un certificado de estudios en el que constan asignaturas que Santillana nunca ha cursado", así como un periodo de internado en Lima, "a pesar de que jamás ha viajado a Perú".