El delegado territorial de la ONCE, Fernando Rico, participó ayer en una reunión con la alcaldesa Elena Nevado y la concejala de Accesibilidad, Marisa Caldera, en la que se puso sobre la mesa la situación actual de la limitaciones que la ciudad impone a discapacitados físicos y sensoriales, especialmente en entornos como la ciudad monumental.
La alcaldesa les trasladó su interés en hacer de Cáceres una ciudad accesible y les confirmó que ya se ha comenzado a trabajar en esa tarea. Entre los proyectos que abordaron se incluye el de buscar puntos en común entre ambas instituciones para mejorar la accesibilidad en la zona monumental. "El conjunto monumental debe ser más accesible", señaló la regidora.
Para ayudar en esa tarea, la ONCE invitó a Nevado y Caldera a realizar conjuntamente un paseo por la ciudad y ver los problemas de accesibilidad que existen en la misma. Desde el gobierno municipal se atendió dicha invitación, con el fin de poder conocer de primera mano cuáles son los obstáculos que día a día se encuentran las personas con algún tipo de discapacidad y así poder dar solución. La reunión, de casi una hora, se desarrolló en un clima de cordialidad.
