La Asociación de Padres y Madres de Alumnos (Ampa) del Colegio Público Donoso Cortés denunciaron ayer las deficiencias que presenta el centro escolar "desde el mismo día de su apertura, hace 14 años", según explicó la presidenta del colectivo, Ana María Guzmán. Ella y una veintena de madres de alumnos de este centro de Infantil y Primaria, se reunieron ayer a las puertas del mismo para exigir a Educación que acometa las mejoras que necesitan las instalaciones en las que estudian sus hijos.

"Algunas de las deficiencias están desde la apertura del centro escolar y no se han subsanado o solo se han parcheado, lo que en ocasiones ha sido peor", explicó Guzmán. Así, la madre de uno de los niños, María Eugenia Solana, denuncia que el pasado mes de octubre su hijo fue hospitalizado tras tropezar con el pico de un sumidero del patio. El informe médico constata que el golpe provocó al niño un traumatismo cranoencefálico. Educación cambió el sumidero, "pero no han solucionado el problema porque ahora tiene un saliente aún mayor", critica la madre del pequeño.

Otra de las deficiencias afecta al aula de deportes. "El gimnasio ya fue clausurado en una ocasión por Sanidad al considerarlo insalubre por el mal olor de las humedades", contó la presidenta de la Ampa. Este hecho sucedió hace dos años y aún así el problema persiste a causa de las humedades que afloran en el techo y las paredes cada vez que llueve.

Otra de las deficiencias que estos padres denuncian es que el patio de los niños está repleto de desniveles. Se trata de la zona en la que juegan los alumnos más pequeños, de 3 y 4 años, por eso reclaman que al menos se sustituya la cobertura de loseta o el cemento instalado ahora, por un suelo de caucho que amortigüe las posibles caídas de los niños. Se quejan de que el cemento se echó como una solución de emergencia después de que Sanidad obligara a quitar el arenero que había tras aparecer una plaga de pulgas en él. Los padres lo achacan al descampado que hay junto al patio --la parcela situada entre el tanatorio y la avenida de la Hispanidad-- en el que los vecinos de la zona sacan a sus perros a pasear. Por eso rechazan el nuevo arenero que les están habilitando en el patio trasero del colegio.

Además hay algunos puntos del colegio que consideran peligrosos, como un balcón que hay sobre el tejado y por el que los niños acceden a él. Piden que eleven el muro del balcón o levanten una valla sobre él que les impida saltar hasta el tejado.

ACCIONES CONCRETAS "No queremos un colegio nuevo ni de lujo, simplemente las mejoras que el colegio necesita", reivindicaba. Tras múltiples escritos, Educación aprobó hace casi un año algunas de las mejoras que pedían los padres: duplicar la altura de las verjas que rodean el recinto, adecuar el patio trasero y cambiar las celosías de las aulas de la planta baja para mejorar la iluminación y la ventilación.

"Las obras debían haber comenzado en junio, para que estuvieran finalizadas en septiembre, cuando los niños empiezan las clases, pero no fue así" señaló Guzmán. Los trabajos comenzaron en el mes de octubre, y algunas de las obras no se han iniciado por la oposición de los padres. "Tenían previsto empezarlas en diciembre y nos propusieron llevar a los niños al colegio San Francisco y que los profesores se movieran de un centro a otro", se quejó.

Las madres concentradas ayer aseguraban que esta protesta es la única salida que veían "para que nos escuchen", tras haber presentado reiterados escritos a la Administración regional. "Me consta que desde la anterior Ampa y los propios profesores han pedido las mejoras", señalaba ayer la presidenta de la Ampa ante las puertas del centro educativo. Por su parte, el centro escolar no se pronunció ayer sobre esta cuestión.