Malestar en el colegio Castra Caecilia de La Mejostilla, donde los padres se niegan "tajantemente" a trasladar a sus hijos a otro centro educativo por falta de espacio, aunque sea de forma provisional. Este recinto fue inaugurado en 2007 y se quedó pequeño al instante debido a la fuerte expansión urbanística de la zona, hasta tal punto que en 2009 ya se tramitaba la necesaria ampliación de las aulas. A día de hoy, el colegio ha llegado al límite de sus posibilidades, de modo que si no se dota de tres nuevas clases antes de septiembre, algunos niños serán provisionalmente reubicados en otro centro público de la zona, según el anuncio realizado por la Consejería de Educación.

"No es una opción, no lo permitiremos nunca, lo vemos completamente inviable, rotundamente no", explicaron ayer responsables de la Ampa, que han organizado una asamblea extraordinaria de padres el próximo lunes, a partir de las 18.00 horas, "para analizar el asunto y tomar una posición clara respecto a las medidas que se van a tomar". Además, temen que efectivamente las tres nuevas aulas no estén a tiempo, porque la previsión era comenzar las obras el pasado enero y no hay atisbos.

ESCOLLO El director general de Educación, César Díez Solís, declaró el pasado 8 de febrero que este colegio es la "máxima prioridad" de la Junta de Extremadura en Cáceres, y asumió que existe el compromiso de crear "seis unidades", pero las "dificultades" de la situación actual lo están retrasando. "Nos pondremos en marcha en cuanto las disponibilidades presupuestarias lo permitan", subrayó Díez Solís, aunque reconoció la existencia de "un plan B" por si empieza el curso y no están a punto las tres unidades necesarias. Precisamente, dicho plan consiste en el traslado temporal de algunos escolares.

Los padres consideran esa opción de la consejería "un descalabro", porque supondría "un trastorno para los distintos sectores de esta comunidad educativa". De hecho, la Ampa asegura que la alternativa no gusta a nadie, ni a las familias ni a los propios docentes. "Lo que sí tenemos claro es que nuestros hijos e hijas no son un plan B", sostienen.

El colegio se ha ido quedando pequeño a medida que se creaban más líneas (más cursos por nivel) para dar cabida a la creciente población de Mejostilla. Todas las aulas disponibles ya han sido habilitadas para dar clases, incluida la de informática y la multimedia, "solo queda libre prácticamente el gimnasio", señalan los padres. Además, en primavera comenzará la matriculación de los nuevos alumnos de Infantil. "¿Cuántos podrán matricularse? ¿Cuántas líneas se habilitarán?", se pregunta la Ampa, recordando que muchos alumnos tienen hermanos pequeños que querrán acceder este año al colegio, y que una sola línea sería "un problema".

¿HIJOS SEPARADOS? Los padres temen, además, que el traslado de algunos niños acabe separando a miembros de la misma familia. "No queremos ni imaginar a un padre o una madre con un hijo en cada centro, y aunque no sabemos a quién le va a tocar, esa posibilidad sería alta", afirman. "En cualquier caso, cada niño tiene derecho a permanecer en el colegio en el que se ha matriculado", recuerdan.

En este sentido, la Ampa subraya la fuerte vinculación de la barriada con el centro Castra Caecilia, cuyo funcionamiento y forma de proceder es del agrado general de los padres. "Se ha apostado mucho por este colegio, hay un profesorado joven muy válido e implicado, se ha introducido el bilingüismo", detallan representantes del colectivo.

LLENO EN MEJOSTILLA Lo cierto es que Mejostilla precisa una solución a sus problemas de escolaridad. El elevado número de niños que residen en la zona motiva que cada año pidan plaza más de 200 escolares en los colegios del distrito (Castra Caecilia, Extremadura, Nazaret y Diocesano, estos últimos concertados), insuficientes para acoger a todos. De hecho, desde 2008 se viene hablando de la construcción de un quinto centro, y han llegado a iniciarse los trámites de solicitud de parcelas municipales. Pero la crisis ha dado al traste con el proyecto, incluso complica la ampliación de los colegios ya en marcha, caso del Castra Caecilia, con más de 500 alumnos.