Los alumnos del colegio público Dulce Chacón no llevarán, finalmente, uniforme el próximo curso. Los padres se reunieron ayer en asamblea para tomar una decisión pero no hubo consenso. En un sondeo previo realizado por un grupo de madres ganó el sí al uniforme, pero ayer las voces del no fueron mayoritarias. Ningún centro público de la ciudad ha implantado hasta la fecha el atuendo único. Además, no se puede obligar a ningún padre a que adopte la medida.

Al inicio de la reunión, Pepi Salas, directora del centro, subrayó la neutralidad de la junta directiva aunque consideró conveniente que la decisión de llevar uniforme fuera sustancialmente mayoritaria si se quería implantar, dado que no sería correcto que muchos niños fueran con el uniforme y otros muchos sin él. Fue entonces cuando numerosos padres dejaron claro que no llevarían a sus hijos uniformados. Un no rotundo se elevó entre un ambiente tenso que fue constante durante toda la asamblea. La directora comentó que no quería que por un tema tan trivial hubiera un enfrentamiento entre padres.

Los partidarios del sí estaban sorprendidos porque una encuesta previa pronosticaba un amplio consenso a favor de la prenda. Por este motivo, algunos padres propusieron que en septiembre se hiciera otra encuesta, esta vez más seria, más precisa y más controlada. Un sondeo en el que se pidiera el DNI y las preguntas fueran más exhaustivas.

Algunas opiniones sugerían que, dado que el colegio está en crecimiento y sus aulas aún no están completas, se debería esperar algunos años ante de tomar este tipo de decisiones. Otros, partidarios del sí, consideraban que si la medida no prosperaba tampoco les preocupaba demasiado, dado que hay cuestiones más importantes que debatir y que, por tanto, no se debería perder el tiempo hablando sobre el tema.

La pelota está ahora en el tejado del consejo escolar, que es el órgano que, en definitiva, tiene la potestad de tomar la medida. Aunque todo parece indicar que en su próxima reunión ni se plantee la cuestión.