Cáceres vive días de cine. Los actores españoles Silvia Marsó y Alberto Jiménez, y los argentinos Eduardo Blanco y Claudia Fontán, lo hacen posible. Han llegado a la ciudad de la mano de los directores Jorge y Guillermo Sempere --primos que no hermanos-- para rodar su primer largometraje, Pájaros muertos , que aunque se ha iniciado en Cáceres y se concluirá en Buenos Aires, tendrá como principal escenario la localidad de Arroyo de la Luz.

Actores --faltaron los peques Samuel Villuela, Andrea Blasco, Alejandra Traspas e Inés Aldea, hijos de las dos parejas en la cinta-- y directores, junto con algunos miembros del equipo de producción, hicieron ayer un paréntesis en las secuencias que ruedan estos días en un chalet de La Sierrilla y el club de tenis Cabezarrubia para presentar a los medios de comunicación el trabajo, que todos definieron como "una comedia negra con tintes dramáticos".

La actriz Silvia Marsó ahondó en el significado que se da del pájaro muerto para indicar "simboliza la agonía de la sociedad, que se va viendo en una película que tiene un sentido crítico y que muestra cómo vivimos hoy en día", a lo que su compañero de reparto, Alberto Jiménez, añadió: "Es el descubrimiento de un universo muy peculiar y extraño, pero a la vez muy reconocible".

Es algo en lo que todos los actores coincidieron, como también en destacar la "grata experiencia" que les está causando el rodaje en tierras extremeñas y la "grata sorpresa" por el acogimiento de los cacereños y la calidad de su gastronomía, "como el buen jamón", apuntó el argentino Eduardo Blanco, conocido por películas como El hijo de la novia , La luna de Avellaneda o Conversaciones con mamá .

Al margen de la película en sí, al hablar de cine el actor argentino coincidió con el director Jorge Sempere en resaltar la necesidad de ayudas institucionales que tiene la producción cinematográfica. "Sin el apoyo institucional hoy sería imposible hacer cine en España", aseguraron.

La producción

El necesario apoyo al que aluden directores y actores lo ha tenido Pájaros muertos . Esta película, que según anunció Santos Jorna, alcalde de Arroyo de la Luz, se estrenará en esta localidad en mayo del próximo año, costará un millón de euros, pero cuenta con la financiación de la Junta de Extremadura, que aporta 200.000 euros, y de Televisión Española, que colabora con 400.000 euros --esta tiene los derechos exclusivos para la distribución internacional--. Y también colabora el Ayuntamiento de Arroyo de la Luz con una aportación de 20.000 euros, por lo que las productoras se han comprometido a que aparezca en los créditos.

El director de Promoción Cultural de la Junta, Javier de la Torre, apuntó que la Junta contribuye con el rodaje de esta cinta dentro de la línea de subvenciones que el gobierno regional implantó en el 2005 para ayudas a la producción cinematográfica y a través de las cuales ha repartido ya 900.000 euros entre cuatro largometrajes que se han rodado o se están rodando en la región.

Tras rodar en Cáceres el equipo se traslada el lunes a Arroyo, donde estará hasta el día 28.