El miércoles 20 de abril, Nuestra Señora la Virgen de la Montaña, patrona de Cáceres, bajará a la ciudad con motivo de la celebración del novenario, el acto mariano de mayor tradición histórica de la capital cacereña y que reúne a miles de personas en la concatedral de Santa María y en Fuente Concejo, lugar donde los cacereños reciben y despiden a La Montaña, el mayor icono religioso de Cáceres.

Uno de los actos previos al novenario, y de gran calado entre los ciudadanos, es el pregón. Este año, según explica el mayordomo de la cofradía, Jesús María Larrazábal, se ha elegido como pregonero a un cacereño de pro, Santos Benítez Floriano (Cáceres, 3 de junio de 1957). El acto tendrá lugar en el aula de cultura de Caja Extremadura --en la calle Clavellinas-- y ejercerá de presentador el también conocido cacereño César García González, mayordomo de la cofradía de Nuestro Padre Jesús Nazareno.

Santos Benítez es director del centro de menores Julián Murillo, de Cáceres, y de la revista Ars et sapientia , que edita la Asociación de Amigos de la Real Academia de Extremadura de las Letras y las Artes, de la que Benítez Floriano es también tesorero.

TRADICION FAMILIAR El pregonero fue definido ayer por el mayordomo de la Montaña como un hombre de "una gran devoción mariana". No en vano, Santos Benítez es hermano de seis cofradías penitenciales de Cáceres, secretario de la junta directiva del Nazareno y jefe de turno de la de la Montaña.

Pero su vinculación a la cofradía de la patrona viene de una larguísima generación familiar. Su padre, Manuel Benítez Arroyo --que dirigió la Caja Postal de Ahorros y fue director provincial de Telecomunicaciones-- fue jefe de turno de la cofradía. Además, su abuelo, Santos Floriano Cumbreño, fue mayordomo de la cofradía durante la contienda civil, entre los años 1936 y 1940 y mayordomo del Nazareno durante 40 años.

Igualmente, su bisabuelo, Santos Floriano González, también fue mayordomo de la Montaña y bajo su peculio, a finales del siglo XIX, se concluyó la carretera que va desde el Calvario al santuario. De su bolsillo pagó el sendero de piedra y arena para que los cacereños pudieran transitar por él con mayor facilidad.

Jesús María Larrazábal explicó que la Virgen llegará a la concatedral el miércoles y que al ser un año eucarístico, el Santísimo también permanecerá expuesto en Santa María. Durante esos días tendrán lugar diversos actos, el más tradicional es el del miércoles 27 de abril, con la presentación de los niños a la Virgen. Larrazábal pidió colaboración a los cacereños para que participen masivamente en este acto. La patrona regresará a su santuario el 1 de mayo, domingo, Día de la Madre. En esta ocasión no habrá procesión de bendición de los campos para que la Virgen permanezca durante más tiempo en el templete.

Respecto al recorrido, Larrazábal recordó que el de ida se mantendrá como siempre, pero que el de vuelta variará por las obras que se realizan en la calle Mira al Río. Por eso la procesión discurrirá desde Santa María a San Juan, bajará a la plaza Mayor, a la del Duque y de ahí partirá hacia Caleros. La cofradía de la Montaña tiene más de 3.000 hermanos, aunque la directiva anima a la inscripción.