La Audiencia Provincial de Cáceres juzgó ayer al acusado de agredir sexualmente a una menor. La vista, que comenzó pasadas las diez de la mañana, se celebró a puerta cerrada para proteger la intimidad de la víctima.
El Ministerio Fiscal solicita para el acusado catorce años de prisión por un delito continuado de agresión sexual a una menor, que en el momento de los hechos tenía trece años. Según el escrito de acusación del Ministerio Público en el año 2005 el acusado acudía con frecuencia a casa de la víctima porque mantenía una relación sentimental con la prima de ésta. Ambos iban a menudo a visitar a la familia.
Al menos en tres ocasiones, según el Fiscal, valiéndose del temor que provocaba en la menor y aprovechando que se quedaba a solas con ella, la llevaba a una habitación donde le realizaba tocamientos y obligaba a esta a realizárselos a él también. Amenazaba a su víctima diciéndole que si no se dejaba tocar la pegaría y se lo diría a su madre.
La niña no contó nada de lo sucedido pero, durante los años posteriores, atravesó trastornos de conducta y desarrolló una actitud de "defensa desadaptativa". Fruto de esta circunstancia ingresó en un centro sociosanitario en la localidad de Plasencia. Fue allí donde le contó todo lo que había sucedido al psiquiatra. La víctima fue diagnosticada de trastorno de la personalidad mixto y trastorno de la conducta alimentaria.
Los hechos, según el Ministerio Fiscal, son constitutivos de un delito continuado de agresión sexual, por lo que solicita que se le imponga la pena de catorce años de prisión. También pide que indemnice a su víctima con 20.000 euros por los daños morales ocasionados.
La magistrada titular de la Audiencia decidió ayer que el juicio por esta causa se celebrara a puerta cerrada, sin la presencia de público ni medios de comunicación, para proteger a la víctima, que actualmente tiene 24 años.
