NACIMIENTO 21/12/52

LUGAR MADRID

FORMACION LICENCIADA

EN PSICOLOGIA POR LA AUTONOMA

CARGO DIRECTORA NACIONAL DE ´NO MAS SILENCIO´, UN COLECTIVO INTERNACIONAL QUE SE FUNDO HACE DOS AÑOS EN ESPAÑA POR MUJERES QUE SE HAN SOMETIDO A UN ABORTO

No se oponen de forma radical al aborto, pero no lo comparten. Su objetivo es informar a las mujeres "correcta y ampliamente" de las consecuencias de este paso, que aseguran que son graves, para que decidan con más conocimiento y "siempre" bajo los supuestos de la ley. Esa es la labor de No más silencio , una asociación de mujeres que han tenido un aborto provocado y que ahora se prestan a ayudar al resto. Su directora en España, Pilar Gutiérrez, ofreció ayer una charla en Cáceres y habló con este diario.

--¿Son tan graves las secuelas?

--El síndrome post-aborto afecta al 91% de las mujeres. Es una forma de estrés post-traumático que aparece en las víctimas de desastres y actos violentos, un grave trastorno psicosocial que ocasiona índices de suicidio tres veces superiores a la media, está muy contrastado. Entre las secuelas están las enfermedades físicas que se crean o agravan por el estrés y la ansiedad, como diabetes, problemas hepáticos, de corazón, circulatorios (hay un 446% más de probabilidades de trastornos cerebro-vasculares) y cáncer (muy psicosomático). Entre las psicológicas destaca la depresión, que puede ser crónica porque no se trata, ni siquiera los médicos quieren conocer este síndrome al ser un tema político. En países con más años de libertad sí está sobradamente reconocido. También surgen problemas psicosociales: puede crecer cinco veces el abuso de alcohol y drogas por estrés. Estamos muy asombrados con los datos.

--¿Por qué se producen?

--Por el tabú, por la censura social y política sobre las posibles secuelas. Está mal visto que el aborto pueda ser peligroso, y la mujer no se atreve a hablar, a contarlo, a lo que se une su propio proceso de culpa. Hay un silencio impuesto por la sociedad.

--¿Tiene Extremadura una incidencia especial al respecto?

--Las tasas más altas se dan en Madrid, Barcelona, Andalucía... En Extremadura no, pero tampoco se puede asegurar porque pueden abortar en otra región.

--El último estudio del CSIC desvela un 71% más de abortos en la última década, y una cifra alta de mujeres que dan este paso en más de una ocasión (una de cada cuatro). ¿Qué opina?

--El próximo año llegaremos al millón de abortos desde su despenalización en 1985, un número muy elevado, y el 25% de esas mujeres reinciden... ¿por qué? Una de las secuelas es que algunas buscan un embarazo de reemplazo para reparar el daño. Pero como su situación no es buena por la ansiedad, tampoco se sienten capaces y abortan de nuevo. Se hace crónico, se agravan los síntomas, es una pena.

--¿Con qué supuestos estarían de acuerdo para permitirlo?

--Nosotros sabemos que es un factor de riesgo. Yo le preguntaría: ¿En qué supuestos apoyaría el tabaco si sabe que hace daño? Sólo queremos que la mujer conozca las secuelas cuando piense abortar por un motivo u otro. A partir de ahí, que tome la decisión que la ley le permita.

--¿Qué medidas propondrían?

--Más conocimiento desde las escuelas, una información objetiva y no política. También que se cumpla la ley. Ahora mismo un 98% de los abortos son ilegales y mueven una auténtica mafia, dinero negro, intereses asociados a altos niveles políticos. El PSOE y algunos medios nos han querido quitar una ayuda que destinamos a asistir gratis a mujeres que han abortado y a formar a los sanitarios para que sepan ayudarlas.