El nuevo Plan General Municipal (PGM) de urbanismo iniciará hoy su último trámite: la revisión del documento por técnicos de la Junta, su examen y debate por los miembros de la Comisión Regional de Urbanismo, la resolución del consejero y su publicación en el Diario Oficial de Extremadura que significará su entrada en vigor. La vez anterior que el plan entró en la Junta se tardó diez meses entre que el documento llegó a la consejería, en mayo del 2007, y la decisión de la Junta, con el acuerdo de la comisión, de suspender su aprobación en febrero del 2008 hasta que se adecuara a las consideraciones hechas por sus técnicos.

El documento que entrará esta mañana deberá tener un recorrido bastante más corto. Las últimas manifestaciones del consejero, José Luis Quintana, han ido en ese sentido y además el nuevo plan ha rebajado sus previsiones en cuanto a nuevos suelos urbanizables (una de las objeciones planteadas por la Junta). No obstante, mantiene un potencial de 33.629 viviendas en nuevos suelos urbanizables, a las que se suman las previstas en terrenos urbanos (Las Carmelitas, en los bordes de San Marquino...), que si se edificasen albergarían a 100.000 residentes, el doble de la población de derecho de Cáceres. A esto se añade que el plan de urbanismo que está en vigor no está agotado y hay sectores que, pese a tener la urbanización, cuentan con muchas parcelas vacías.

La alcaldesa, Carmen Heras, entregará personalmente el documento del nuevo plan en el registro de la consejería de Fomento esta mañana y el consejero informará del trámite que aún resta. Es difícil que el plan de urbanismo pueda estar aprobado definitivamente por la Junta antes de finales de año, dado que ahora se tendrá que revisar la documentación por los técnicos de la consejería. Quintana ya anunció hace dos semanas que cuando se hayan cumplido todos los requisitos se convocará una reunión extraordinaria de la comisión de Urbanismo para que informe sobre el nuevo plan de Cáceres. En este órgano regional participan, además de representantes de la administración, miembros de colectivos profesionales.

GEMACA Entre el pleno del pasado lunes y el acto de hoy de presentación del plan en la consejería, ayer se reunió la comisión municipal de Urbanismo en sesión ordinaria, en la que se informó del listado de los bienes y derechos afectados por las obras del paso inferior para salvar las vías del tren entre Aldea Moret y el poblado minero. El expediente de expropiación afecta a tres propietarios y la superficie a obtener no llega a los 1.000 metros cuadrados. En otro punto de la comisión se abordó la determinación del justiprecio de terrenos a expropiar para la conexión de la urbanización de Río Tinto con la carretera de Badajoz. La propiedad presentó una valoración del terreno a conseguir de 100.978 euros, mientras que la valoración que del mismo suelo hace el ayuntamiento, a través de la empresa Tinsa con la que tiene un contrato de asistencia técnica, es de 1.220 euros.

Ayer también se reunió el consejo de administración de la empresa de capital municipal Gemaca. Uno de los posibles usos que se están barajando para dar contenido a Gemaca es que se constituya en empresa pública de gestión del suelo tras la entrada en vigor del nuevo plan.