El plan general de urbanismo limita las posibilidades de uso del edificio sindical, aunque no aparece catalogado como inmueble a proteger. La normativa urbanística en vigor sólo permite equipamientos sociales en este solar, su ordenación es incluso más restrictiva que la fijada para el edificio del Banco de España. En el espacio que ocupa el inmueble sindical se pueden realizar edificaciones destinadas a fines culturales y para asociaciones (bibliotecas, academia, guarderías...), sanitarios y asistenciales, religiosos y administrativos.

La Comisión Consultiva Nacional del Patrimonio Sindical, organismo que depende del Ministerio de Trabajo, acordó en su último pleno la puesta a la venta del edificio, que además de su valor histórico tiene el atractivo de su ubicación, en el centro administrativo y comercial.

Pero su actual ordenación está abierta a la posibilidad de modificaciones, ya que se está revisando el plan general de urbanismo y entre las nuevas utilidades a añadir podrían estar las dotaciones comerciales. Sería mucho difícil que entrasen los usos residenciales, ya que la legislación extremeña regula que en el suelo urbano consolidado con una importante densidad edificatoria no se podrá aumentar ésta, y se aconseja que se procure reducirla o que "a lo sumo se mantenga en su intensidad el grado de consolidación característico del último medio siglo".

El acuerdo no sólo coincide con el proceso de revisión del plan de urbanismo, sino también con el interés que el Corte Inglés muestra por instalarse en Cáceres a medio plazo. No obstante, el solar de Las Carmelitas, que ocupa una hectárea frente a los mil y pico metros cuadrados del edificio sindical, aparece como la primera opción.