En todo sistema urbano, las plazas son el centro de la vida social, cultural y económica. Desde sus orígenes han sido un microorganismo en un sistema donde ocupan el lugar más importante de la vida de la comunidad. Son lugares estanciales, de encuentro, donde se producen los acontecimientos más interesantes y emotivos.

Ante quienes piensan con actitud reactiva que hay que dejarlas como están, otros afirmamos que Cáceres necesita su mejora continua y adaptación para seguir añadiendo valor a la ciudad, siempre en constante progreso y mejora, so pena de caer en el más grotesco inmovilismo de los que tienden a pensar que la historia de la ciudad se limita al tiempo de nuestra vida, a los recuerdos de nuestra infancia.

Cualquiera puede ver cómo en ciudades que progresan desde el respeto a su cultura, las plazas de sus centros se han convertido en espacios atractivos para la inversión, impulsando con su rehabilitación la apertura de librerías, tiendas de artesanía, restaurantes, chocolaterías, galerías de arte, hoteles, fruterías, tiendas de regalo o cererías, por poner ejemplos.

Cáceres necesita presumir de sus plazas, disfrutar de ellas, arrebatárselas a los vehículos, ponerlas al servicio de las personas para convertirlas en sitios donde el olor de las plantas, el sonido de la naturaleza, la luz y los espacios estanciales inviten al encuentro relajado para los cacereños y sus visitantes. Debemos impulsar el placer de vivir en la ciudad, al mismo tiempo que promovemos la actividad emprendedora y el empleo.

El gobierno socialista de Cáceres defiende que desde la plaza Mayor, espacio neurálgico del casco histórico, debemos promover un plan de recuperación de plazas públicas para que conformen una red arterial impulsora de espacios ciudadanos atractivos para la concentración de actividades sociales, comerciales y culturales.

Las remodelaciones de Santa Clara, La Soledad, San Juan o La Concepción durante esta legislatura forman parte de un objetivo, la creación de una red de plazas a las que debemos sumar en el futuro las de Canterías, la Audiencia o Santiago y comunicarlas a través de calles peatonales con un mobiliario urbano y una vegetación que inviten a descubrirlas y disfrutar de su estancia en éstas.

Todos deberíamos realizar un ejercicio de imaginación para definir la ciudad que queremos en los próximos años. Desde el gobierno socialista de Cáceres proponemos la recuperación del casco histórico articulada en torno a las plazas como espacios estanciales llenos de visitantes y cacereños que disfrutan del sonido de sus fuentes, del placer de la lectura, de la sombra de sus árboles, de la charla tranquila, del descanso y la confidencia. Al fin y al cabo, las plazas son salones urbanos donde compartimos nuestro vivir cotidiano.

Si las hacemos atractivas, también haremos rentable la inversión y su revitalización. Seamos creativos y convirtamos a Cáceres en un lugar aún mejor para vivir. Recuperar las plazas, al igual que el proyecto "de Intramuros a Europa", también forma parte de la iniciativa por conquistar la capitalidad europea de la cultura en el 2016.