El pleno del ayuntamiento debate en su reunión de hoy las condiciones del nuevo concurso para el servicio de zona azul. El expediente llega con los votos a favor de los grupos políticos del PP y C’s, que suman concejales suficientes para su aprobación, y el rechazo del PSOE y de CACeresTú (Podemos). La discusión se desarrollará en un salón de plenos que estará más concurrido que en otras sesiones, ya que anoche, en una reunión en el Foro de los Balbos a la que asistieron entre 150 y 200 ciudadanos contrarios a la nueva reordenación, se acordó ir al pleno para poner de manifiesto que se está en contra de que se doblen las plazas.
El contrato de la zonal azul, por el que Cysex se encarga de este servicio desde 2012, finalizó en septiembre. Ahora toca renovarlo. Hay dos opciones. Una es la gestión directa por el ayuntamiento. La otra es la indirecta para que sea una empresa la que asuma los costes de renovar los paquímetros, ya que hay que cambiarlos todos, y de pagar al personal, a cambio la empresa se queda con los ingresos de la zona azul hasta que cubra los costes de su oferta, incluido el beneficio industrial, que en una estimación que han hecho técnicos del ayuntamiento se calculan en 872.878 euros. Si se recauda de menos, la pérdida la tiene que asumir la empresa. Si es más, el dinero se lo reparten entre la empresa y el ayuntamiento, que al menos tiene que percibir el 50%.
MÁS PLAZAS/ La novedad es que se dobla el número de plazas de pago, de las 850 que hay ahora se pasaría a 2.070, más otras 69 de carga y descarga, que cuando termina el horario de esta tarea pasan a ser de zona azul, y 152 de una nueva zona, denominada amarilla, que es las más cercana a la parte antigua y donde solo podrán aparcar los residentes (pese a la amplitud de su perímetro, son diez calles, que es donde ahora se puede estacionar). Las calles que quedarían dentro de la zona azul se triplicarían, de las 16 de ahora se pasaría a 54.
Es ese aumento de plazas y de calles el que provoca el rechazo que ciudadanos expresaron en la reunión de anoche, en la que hubo intervenciones en las que se calificó la zona azul de «robo», se recordó que «ya estamos pagando demasiado impuestos» y se apuntó que como medidas de rechazo, además de la protesta, está negarse a pagar el impuesto de rodaje o acudir a la fiscalía. Anoche se quedó en celebrar nuevos encuentros, buscando más apoyos, para concretar nuevas medidas de protesta por si en el pleno de esta mañana se aprueba el expediente de la zona azul.
POSICIÓN DE LOS GRUPOS/ El gobierno local (PP) defiende la nueva zona azul con varios argumentos. Uno es que el plan de movilidad urbana, el documento que sirve de base para los cambios del tráfico en la ciudad, aconseja por las característica de Cáceres una reordenación incluso mayor que la que se lleva al pleno, además el portavoz del gobierno, Rafael Mateos, recordó cuando se avanzó la propuesta que el actual sistema de zona azul no garantiza la rotación de las plazas y sí está llevando más tráfico al centro, además de no formar un área compacta. «Ahora lo que hay son calles azules, no una zona azul».
Ciudadanos respalda la propuesta porque el gobierno ha aceptado sus condiciones, una era sacar de la idea inicial zonas como Casas Baratas y Antonio Canales y calles como Reyes Huertas y vías anexas. La otra era que la tarifa de residentes pasase de los 5 euros al mes de la primera iniciativa a tres. Al aceptarse , «ejercemos una oposición responsable», explicó el concejal de Ciudadanos, Antonio Ibarra.
El rechazo del PSOE obedece a que con este incremento de la zona azul «se catiga» al ciudadano que no reside en el centro, resumió el portavoz socialista, Luis Salaya, mientras que el edil de CACeresTú, Ildefonso Calvo, afirmó que la ampliación es «desmesurada» y añadió que «no generará beneficio» y que «supondrá un sobrecoste para los que quieran aparcar» en la zona centro.
La alcaldesa, Elena Nevado, reiteró ayer que el gobierno no se ha planteado suprimir el aparcamiento gratuito del parque del Príncipe. Con ello respondía a la Plataforma Ciudadana en Defensa de los Servicios Públicos, que fue la convocante de la concentración de anoche. Nevado aseguró que detrás de la plataforma hay representantes de IU, que usan la plataforma «para ocupar el espacio que los ciudadanos no le han dado» en las instituciones. Sobre Virgen de Guadalupe, no se restituirán los aparcamientos del centro. La base de lo que se pretende hacer es el plan de movilidad, que propone crear un paseo central en toda la avenida.
