Agentes de la Policía Local se vieron ayer obligados a intervenir en un improvisado y multitudinario botellón que se celebróen el Olivar Chico de Los Frailes.

El grave estado de embriaguez en el que se sorprendióa un joven de tan solo 14 años, cuando aún no eran ni las seis de la tarde, fue lo que dio la voz de alarma que llevó a la intervención.

Finalmente no fue necesario el desalojo. La presencia policial hizo que las bebidas alcohólicas desaparecieran y no se sorprendiera a ningún menor de edad consumiendo alcohol. Sí se advirtió, no obstante, de la prohibición.