El ayuntamiento, a través de la Policía Local, estudiará la calle Londres para valorar si necesita mejoras en materia de seguridad. La decisión se toma después de que el pasado martes ocurrieran tres atropellos en esta vía, dos por la mañana y uno por la tarde. Uno de los heridos, de 57 años, se encuentra aún en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) tras sufrir un traumatismo craneal grave y policontusiones en todo el cuerpo. El resto de los heridos ya ha sido dado de alta.

«Vamos a esperar a que la Policía Local elabore el atestado y, como hemos hecho en otras vías, si hay que adoptar algún tipo de medida excepcional lo haremos, porque lo más importante son las personas», señaló ayer la alcaldesa, Elena Nevado; aunque añadió que no se trata de una calle especialmente peligrosa. En lo que sí se incidirá es en la concienciación de la sociedad cacereña para que, tanto conductores como peatones, tomen más precauciones.

De los tres atropellos ocurridos en esta calle el martes dos de ellos fueron por la mañana, con media hora de diferencia. El primero, en un paso de peatones ubicado frente a la fachada del centro comercial Ruta de la Plata y el segundo, en otro junto al colegio Licenciados Reunidos; el afectado en éste es el que presenta heridas más graves y permanece ingresado. En ambos casos los vehículos circulaban en sentido a la glorieta de Alfonso IX (que conecta la calle Londres con la avenida Virgen de Guadalupe).

Según las primeras hipótesis los conductores se deslumbraron por el sol, que a esas horas (los accidentes ocurrieron entre las nueve y las diez de la mañana) se encuentra aún muy bajo y molesta a los ojos. «Creo que los conductores tenemos que concienciarnos de que la vía pública y la señalización hay que respetarla y cuando uno se aproxima a un paso de peatones, si tiene que detenerse porque se deslumbra o no ve, tiene que hacerlo aunque no sea consciente de que en ese momento vaya o no a pasar una persona», insistió Elena Nevado. El tercer atropello tuvo lugar por la tarde. Un vehículo alcanzó a una persona que acababa de estacionar su coche y le golpeó en la pierna, pero no necesitó traslado a ningún centro médico.

Los vecinos de Vía de la Plata y Cabezarrubia, barrios en los que se encuentra la calle Londres, solicitan que la vía se convierta en zona 30, como ya se hizo con un tramo de la avenida de La Hispanidad, donde se han registrado también varios accidentes. No obstante las estadísticas que maneja la policía indican que los cacereños no respetan esta medida implantada en esta avenida: «Lamentablemente en La Hispanidad ha habido muchas sanciones por superar el límite de velocidad establecido. Si uno circula a 30 es muy difícil que pueda atropellar a alguien. Por eso pido respeto a las normas de circulación porque cuando se imponen, siempre tienen una razón detrás», dijo ayer la regidora cacereña.

VISIBILIDAD / Los vecinos de la calle Londres y adyacentes solicitan además que se efectúe un repintado de todos los pasos de peatones del barrio, porque algunos ya casi ni se ven. Y que en todos los accesos a las vías principales (Londres, París y Amberes) se coloquen espejos retrovisores que faciliten la visibilidad en los cruces. «Demasiados pocos accidentes pasan. La calle Londres es una calle muy concurrida, no solo en las fechas cercanas a Navidad porque la gente acude al centro comercial a comprar, sino siempre; y en los cruces no hay visibilidad. Es peligroso», indica el presidente de la asociación de vecinos Vía de la Plata, Victoriano Sánchez.

MÁS PETICIONES / A esto se une lo que solicitan los padres de colegio Licenciados Reunidos, centro que se encuentra situado en un extremo de la calle Londres y en el que estudian cerca de 1.500 alumnos. La Asociación de Madres y Padres (Ampa) pide que los pasos de peatones de esta vía se doten de semáforos con pulsador, como se ha llevado a cabo en la avenida de La Hispanidad, en la confluencia de los colegios Moctezuma y María Auxiliadora.