Los horarios de cierre de bares y establecimientos hosteleros, los ruidos íntimamente relacionados con los mismos, así como las concentraciones de jóvenes en los botellones son algunos de los asuntos que generan cierta problemática en lo que a seguridad ciudadana se refiere y que, por tanto, afecta directamente a la labor de los cuerpos policiales.

Y como tal fueron abordados ayer en la Junta Local de Seguridad, en la que se destacó la "importante" labor conjunta que para su control están realizando Policía Nacional y Local, así como los "buenos resultados" que están dando las medidas adoptadas hasta ahora. Entre ellas, la restricción del tráfico en la zona de La Madrila y la presencia de patrullas en el foro de los Balbos, o el mayor control policial en los establecimientos de venta de bebidas, como multitiendas, supermercados..., para evitar la adquisición de alcohol por menores.

Lo expuso así la alcaldesa, Elena Nevado, como presidenta de la Junta Local de Seguridad, en la rueda de prensa que, tras su celebración, ofreció junto al subdelegado del Gobierno, Fernando Solís.

Respecto al control de los ruidos y horarios de cierre Nevado indicó, como prueba de ese mayor control, que en los últimos doce meses la policía local ha levantado casi medio millar de actas en bares y establecimientos hosteleros por incumplir los horarios de cierre, de las que unas 25 "han sido derivadas a la Fiscalía por desobediencia", por hacer los dueños de los establecimientos "caso omiso a los requerimientos de los agentes y a los expedientes instruidos".

En este asunto, hizo constar la presidenta de la Junta Local de Seguridad, la policía "está siendo muy estricta y lo va a seguir siendo". Aseguró que se va a seguir denunciando a quienes incumplan los horarios de cierre, "que no hay que olvidar se les pueden llegar a imponer multas de hasta 5.000 euros", y actuando en este con "total rigor".

Prueba de ello, señaló Nevado, es que en la Junta Local de Seguridad celebrada ayer "ha estado presente" Saturnino Corchero, director general de Justicia e Interior de la Consejería de Administración Pública, "pues como es sabido la competencia en este materia la tiene el Gobierno de Extremadura, que también mantiene en este aspecto una línea totalmente inflexible".

MAYOR CONTROL

En cuanto a los botellones, otro asunto abordado en la Junta de Seguridad, se anunció que se van a reforzar las labores de vigilancia que realizan en ellos, de manera coordinada, la Policía Nacional y Local, "pues se ha constatado que existen determinados actos vandálicos que se producen durante su celebración o en torno a ellos".

En el caso concreto de los que se celebran a partir de los jueves en el Olivar Chico de los Frailes, "donde también se ha constatado que se concentran más de 300 jóvenes, la mayoría de ellos menores de edad", Nevado señaló que la policía intensificará aún más los controles en sus inmediaciones, así como en las multitiendas e hipermercados, para evitar la venta de bebidas alcohólicas a menores.

Y respecto a las pintadas y grafitis, muy directamente relacionados también con los jóvenes, la alcaldesa reconoció que el hecho de que el nuevo Código Penal ya no los contemple como delito de daños, sino solo como una mera falta de deslucimiento de los bienes muebles e inmuebles, "complica la reclamación de responsabilidad a los autores por parte de las Administraciones públicas".

Pero pese a ello, hizo constar Nevado, "cabe destacar también que las pintadas en la ciudad se han reducido en los últimos cuatro o cinco meses", así como que está resultando "muy importante y beneficioso" el archivo que está elaborando la Policía Científica, del Cuerpo Nacional de Policía, con todos los grafitis, "identificando a los autores de cada uno de ellos para facilitar las reclamaciones y tratar de conseguir erradicar su propagación".