Un total de 75 jóvenes, participantes en una fiesta celebrada en un piso de estudiantes situado en un edificio de una céntrica calle de la ciudad, tuvieron que ser desalojados por la policía local. Ocurrió la madrugada de ayer, concretamente sobre las 01.00 horas, en el número 8 de la calle Antonio Hurtado.

Fueron numerosas las llamadas que durante la noche-madrugada de ayer se recibieron en la Jefatura de la Policía Local denunciando molestias por ruidos causados por celebraciones de fiestas en muy distintos puntos de la ciudad, pero el caso ocurrido en Antonio Hurtado "ha sorprendido por el elevado número de participantes", señalaron a este diario fuentes policiales.

El desalojo del piso, que ocupan tres estudiantes, no estuvo exento de problemas, pues según la información facilitada, los policías que intervinieron tuvieron que identificar a uno de los asistentes, al que posteriormente denunciaron en la comisaría por insultos a agentes de la autoridad. Y, asimismo, la Jefatura ha elaborado la oportuna denuncia por escándalo público, la cual será remitida a la Subdelegación del Gobierno para que adopte las medidas que se consideren necesarias.

SORPRESA VECINAL Los vecinos del número 8 de la calle Antonio Hurtado no podían creer ayer que en la fiesta que se celebró en el tercer piso de du edificio hubiera 75 personas. "Nosotros les vimos salir y la verdad es que eran muchísimos, pero no imaginábamos que fueran tantos", reconocía una vecina, al tiempo que otro comentaba: "Es imposible que en una casa como ésta, con un salón no muy grande y tan sólo una alcoba, puedan entrar 75 personas, realmente resulta difícil de creer".

Todos reconocen que "armaron bastante escándalo, lo normal cuando un grupo de personas está de fiesta a la una de la madrugada estando el resto en silencio", pero manifiestan también, al menos la mayoría, que las estudiantes que viven en el piso "no suelen causar molestias ni celebrar fiestas, esto ha sido algo muy puntual".