La policía consiguió frustrar la semana pasada unos robos que, de haberse consumado, habrían sido sin duda de los más importantes cometidos en naves del polígono de Las Capellanías, cuyas alarmas manipularon los autores evitando su activación. Aunque estos aún no han sido detenidos, agentes de las brigadas provinciales de las Policías Judicial y Científica continúan las gestiones para su rápida identificación y detención.

Y es que pese a la rápida y arriesgada actuación de los agentes del Cuerpo Nacional de Policía que intervinieron en la actuación, no se consiguió evitar que lograran huir, aunque sí que se llevaran los dos camiones que ya tenían cargados de tabaco, por valor de varias decenas de miles de euros, y otros efectos robados. Y evitaron también que los delincuentes llegaran muy lejos, pues consiguieron alcanzar las ruedas de su vehículo con sus disparos, lo que les obligó a abandonarlo tras recorrer unos 11 kilómetros.

Por la actuación de esta banda de delincuentes en Las Capellanías se vio especialmente afectada la distribuidora de tabaco Logista, cuyo propietario cifró en 125.000 euros los destrozos causados en sus naves.

Del suceso informó este diario el pasado día 20, y ayer la Jefatura Superior de Policía informó de la actuación policial. Tuvo lugar sobre las 3.30 horas del día 18, cuando agentes de la Brigada Provincial de Seguridad Ciudadana de la Comisaría de Cáceres detectaron la presencia de tres individuos en una de las naves del polígono y se acercaron para identificarles. Fue en ese momento cuando "uno de ellos les encañonó con una escopeta y emprendieron la huida en un Audi", con el que intentaron atropellarles.

Ante este hecho, y para evitar su huída, "los agentes hicieron varios disparos al aire como advertencia, y varios al vehículo que los embestía, que resultó alcanzado por los impactos tanto en la carrocería como en las dos ruedas del lado derecho". Pero a pesar de los impactos recibidos y del pinchazo de las dos ruedas alcanzadas, "los delincuentes huyeron realizando un recorrido de al menos 11 kilómetros antes de abandonar el vehículo" que, una vez intervenido, se comprobó que había sido sustraído hacía ocho meses en una localidad cercana a Madrid, y duplicado sus placas de matrícula.

Y en su interior se encontraron numerosos objetos e instrumentos de los utilizados para cometer los robos, como una lanza térmica y bombonas de oxígeno para apertura de cajas de seguridad, y un soplete de oxiacetileno para apertura de cajas fuertes.