La Policía Nacional ha extremado la vigilancia entorno a la urbanización Ceres Golf, tras la denuncia expresa de la comunidad de vecinos por la existencia de un narcochalet en esta zona. El detonante de la protesta ciudadana fue la detención el pasado lunes de un presunto traficante que salía de esta vivienda y que arrojó en su huida 30 dosis de heroína. La comunidad de propietarios señaló a la inquilina de la casa, una conocida aristócrata cacereña, al parecer, como responsable del tráfico de drogas en esta urbanización.
Fuentes vecinales, que prefirieron no identificarse por miedo a represalias, explicaron que el trasiego de vehículos de lujo que acuden a esta casa ha sido constante en los últimos meses. Los afectados reconocieron sentir miedo ante la presencia de individuos en busca de este domicilio alquilado desde mayo del 2003 por el plazo de un año.
Estas mismas fuentes indicaron que la inquilina lleva cuatro meses sin abonar las mensualidades y no responde a los requerimientos de los propietarios ni de la agencia inmobiliaria en la que alquiló la vivienda. Ante la alarma del vecindario, la comunidad decidió en febrero iniciar un proceso para solicitar la privación de uso de la vivienda por actividades molestas, en virtud a la ley de Propiedad Horizontal.
Responsables policiales aseguraron ayer que siguen hace varios meses la pista de la inquilina y afirmaron que ésta presuntamente utiliza a personas como correo de la droga.
