Agentes de la Policía Nacional de Cáceres muestran su apoyo a sus compañeros catalanes por los atercados ocurridos esta semana a consecuencia de las detenciones por el referéndum del 1 de octubre. Se han concentrado en la puerta de la comisaría «como muestra de apoyo a la difícil situación crispada en la que están muchos de nuestros compañeros así como la Guardia Civil», teniendo que sufrir en determinados momentos «una situación tensa francamente complicada», dicen a través de un comunicado.

Con esta concentración se unen a las que se están llevando a cabo en otras ciudades españolas. «Lo que queremos es que nuestros compañeros puedan recibir el calor de sus colegas», indican. Y anuncian que continuarán con estas concentraciones mientras sigan los altercados en Cataluña.

Además solicitan que se les proteja y se les provea del material suficiente para poder afrontar su labor policial «sin riesgos», añaden.

Una de las peores jornadas se vivió el pasado miércoles en el operativo desarrollado por orden judicial, en el que se detuvo a 14 personas por su relación con los preparativos del referéndum del 1 de octubre suspendido por el Tribunal Constitucional. Tal y como informaba ayer este periódico el operativo se desplegó a primera hora de la mañana y hasta pasada la medianoche no dispersaron a los manifestantes, que rompieron cristales, realizaron pintadas (algunas amenazantes) y dañaron la tapicería de los coches de los agentes. También sufrieron daños las patrullas de la Guardia Civil, cuyos vehículos acabaron con las lunas rotas y repletos de basuras y desperdicios, por lo que fueron retirados por grúas. La concentración de los agentes en Cáceres quiere mostrar su apoyo también al Instituto Armado.

PERITAR LOS DAÑOS / Ya se han comenzado a peritar los daños causados en su flota de coches oficiales, incluyendo algunos camuflados. Los mayores daños los sufrieron tres todoterrenos aparcados frente a la sede de la ‘conselleria’ de Economía con los que se cebaron los numerosos independentistas descontentos con la actuación judicial. El daño causado podría oscilar entre los 4.000 y 15.000 euros por vehículo, según calculan fuentes de la Guardia Civil. La Audiencia Nacional ha denunciado ya estos actos por un delito de sedición.

La concentración en Cáceres no ha sido convocada por ningún sindicato en particular y en ella han participado agentes de la plantilla de manera individual.