Los instalaron hace algo más de dos meses en la ronda cacereña de Vadillo para delimitar el carril bici. Se trata de unos pivotes delimitadores de más de 70 centímetros. Son tan grandes que muchos de ellos están destrozados por los golpes de vehículos, dado el elevado volumen de tráfico de la vía.

La situación está generando críticas entre los conductores porque la presencia de las balizas dificulta que los automóviles se aparten ante cualquier imprevisto o por la presencia de ambulancias, al tratarse de una vía fundamental que conecta con el Hospital Universitario de Cáceres.

El concejal de Tráfico, Andrés Licerán, ha dicho que se retirarán.