El presidente de la Junta ha reiterado que no se adoptará la figura del Proyecto de Interés Regional (PIR) para poner en marcha la mina de Cáceres y ha insistido que "la última palabra la va a tener el Ayuntamiento de Cáceres" que deberá resolver la solicitud de modificación del Plan General Municipal (PGM).

En cuanto a la posición socialista, ha subrayado que "la votará el PSOE de Cáceres", pero "obviamente en contacto" y de manera "acordada" con la dirección regional del partido.

El jefe del Ejecutivo regional ha abogado por dejar que el proceso siga su curso y "se desarrolle adecuadamente la tramitación administrativa de la declaración medioambiental", en un contexto de transparencia y "con participación de todo el mundo".

También ha lamentado que "nadie está pensando en si es bueno o malo", sino en "ver cómo se lo tiramos al de al lado a la cabeza", al tiempo que ha invitado a reflexionar sobre el hecho de que "en Portugal vayan a sacar 30 minas a explotación" y su apuesta por el litio.

En esta línea, ha reclamado que no se caiga en debates "estériles" ni se convierta el proyecto de la mina de litio en "un debate de buenos y malos" porque nadie es mejor ni peor por defender una postura u otra, ni se puede acusar de estar en contra del "progreso y del empleo".

Lo que hay, ha matizado, es "un debate de los que viven más pegados o viven más lejos", pues hay gente que "pone en duda si una mina tan pegada a la ciudad es viable o no es viable desde el punto de vista medioambiental".

En este sentido, no cree que haya "nadie en Cáceres que si la mina de litio no estuviera pegada a la ciudad, tuviera nada en contra" de la misma.