Santiago Ruiz Aberturo ha pintado en su celda toda una Navidad de color azul. Su postal dibujada sobre una cartulina tamaño folio obtuvo ayer el primer premio del concurso anual de tarjetas navideñas, que organiza el Centro Penitenciario de Cáceres y la pastoral de la prisión. La obra ilustrará en breve mil nuevos calendarios de bolsillo del 2007, que se distribuirán entre los internos, sus familiares y el personal de la cárcel.
Es el quinto año que se celebra este concurso con el que se pretende impulsar la expresión artística de los internos de la cárcel. "Es una idea muy buena para nosotros, una forma de mantenerse entretenido y pensar menos", valoraba ayer Jorge Luis Canelo, uno de los dos internos que representaron a la población reclusa en el jurado, que se reunió ayer para emitir su fallo.
En esta ocasión, el incremento del número de premios, de tres a cuatro, y su mayor dotación económica, ha incentivado a un mayor número de presos a medir su destreza con los lápices y las pinturas. Este año han competido 75 dibujos, 25 más que el año pasado. Todos se expondrán en el aula de cultura de la prisión. "El nivel es cada vez más alto y hay más originalidad en los dibujos que presentan", aseguró Alejandro Papakiritsis, miembro también del jurado.
La prisión les facilita el material y los presos pintan en sus celdas. Portales de belén, árboles navideños, Papá Noel y otros motivos característicos de la fiesta se plasman en trazos aficionados pero cuidados.
La Navidad de Santiago Ruiz ha sido la más puntuada. Como ganador recibirá 180 euros, el doble que el año pasado. La mitad del dinero será para él y la otra, se donará a quien desee. Ruiz ha ganado este año otros tres concursos nacionales de dibujo en el entorno penitenciario. La cárcel le ha descubierto su faceta artística.
