No habrá consenso político en la aprobación inicial del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU), el que fijará el crecimiento urbanístico de Cáceres en los próximos 25 años. El alcalde, José María Saponi, no consiguió arrancar ayer el voto a favor ni del PSOE ni de IU en las últimas rondas de contacto que mantuvo con los portavoces de ambos grupos.

La "llamada a la responsabilidad política" que transmitió Saponi y el ambiente de "acercamiento" y "cordialidad" en el que se han desarrollado los encuentros, según el portavoz adjunto del PP, Javier Castellano, no han sido suficientes para salvar todos los obstáculos que los separan. Aún así, y tras el anunciado apoyo del concejal independiente Felipe Vela, la normativa se llevará el lunes a la comisión informativa de Urbanismo y a finales de mes, a pleno.

El grupo socialista mantuvo ayer la incógnita sobre cuál será su voto. Sin embargo, las pegas que sigue poniendo a la redacción actual del PGOU, incluso con dudas sobre su legalidad por prever supuestamente construcciones en zonas protegidas, no hacen augurar un voto afirmativo. "No le hemos dicho --al alcalde-- ni que sí ni que no. Le hemos pedido documentación e información sobre diversos aspectos que deben contemplarse por escrito en el PGOU y que ahora no están", explicó la portavoz del grupo, Carmen Heras.

El PSOE trasladó al alcalde hasta 25 cuestiones sobre los criterios seguidos para decidir los niveles de crecimiento de la ciudad, los recursos económicos con los que cuenta el consistorio para hacer frente a todo lo proyectado o que se definan algunas de las actuaciones, como en los polígonos de Aldea Moret, Charca Musia o el aeródromo. El PP ha prometido dar respuesta a estas cuestiones. "Queremos que no tengan argumentos para no aprobar el plan", dijo Castellano.

LIBERTAD DE VOTO Carmen Heras reconoció que el apoyo de Felipe Vela al plan, con el que el PP logra los 14 votos requeridos para la mayoría absoluta que necesita su aprobación, el PSOE tiene "más libertad" para decidir el suyo. Vino a decir que ya no tiene el compromiso, adquirido por el presidente de la Junta tras la salida de Vela del grupo popular, de garantizar con su voto la gobernabilidad y la aprobación de proyectos fundamentales para Cáceres, como éste.

Javier Castellano señaló, al respecto, que la responsabilidad de uno "no exime a otros de ser responsables". "El PGOU --añadió-- debe ser aprobado por quien tenga una visión razonable de la ciudad y quien aspire a mantener su crecimiento progresivo".

Izquierda Unida confirmó su postura en contra. Tras la reunión con Saponi, el portavoz de su grupo, Santiago Pavón, expresó su convencimiento de que el alcalde "es un hombre honrado y busca el bienestar de la ciudad", sin embargo el proceso de discusión del PGOU en la práctica "no ha existido" ni lo conocen los ciudadanos. "Sólo han cubierto el expediente", valoró.

Además dijo ver "grandes nubarrones" en las cuestiones de fondo, con "grandes recalificaciones" que, en su opinión, interesan a unos pocos pero no buscan el interés general con "sectores muy interesados" y "propiedades muy concretas".