Será la primera residencia extremeña de rehabilitación de enfermos mentales y estará ubicada en La Mejostilla. Su apertura, prevista para principios del 2004, permitirá atender temporalmente a los pacientes cuya situación no es tan aguda para ingresar en un hospital ni tan prolongada que necesite el internamiento en un psiquiátrico. En definitiva, un recurso que faltaba en la región y cuyo coste ascenderá a 1.020.000 euros (170 millones de pesetas), aportados por la Junta (480.000 euros en las anualidades 2002 y 2003) y el Ministerio de Trabajo a través de las partidas del IRPF destinadas a fines sociales. El ayuntamiento ha cedido más de 7.000 metros cuadrados de terreno.

"Durante demasiado tiempo, los poderes públicos no hemos tomado en serio la enfermedad mental. Nos hemos preocupado más de protegernos del paciente que de protegerle a él", declaró ayer el consejero de Sanidad de la Junta, Guillermo Fernández Vara, durante la colocación de la primera piedra. Al acto asistió el alcalde, José María Saponi, la concejala de Bienestar Social, Basilia Pizarro, y Queca Malpartida, presidenta de la Asociación de Padres y Familiares de Enfermos Mentales (Apafenes), entidad promotora del proyecto.

Tendrá 5.000 metros cuadrados de centro residencial y 2.000 para iniciativas de reinserción laboral. El edificio ocupará 1.600 metros y albergará zonas comunes, dormitorios con baño, salones, biblioteca, talleres... Dispondrá de 30 plazas para estancias cortas, medias y largas. Su finalidad: la rehabilitación sanitaria y reinserción social del enfermo. Si todo marcha bien, Badajoz podría tener en el futuro un centro similar.

UN RECURSO IMPRESCINDIBLE

Queca Malpartida subrayó que éste es el mayor proyecto de Apafenes, gestado desde su constitución en 1990 para mejorar el bienestar del paciente. Fernández Vara elogió el esfuerzo del colectivo y destacó el beneficio que supondrá para las familias, "que han estado demasiado tiempo solas", dijo. "Se trata de un recurso imprescindible en el Plan de Salud Mental de Extremadura, tan importante como inaugurar el hospital más grande", añadió. Saponi aplaudió la iniciativa y se comprometió a crear accesos "cómodos" para llegar a este edificio (en un descampado de Ana Mariscal) y a otros colindantes.

La primera piedra fue colocada a mediodía por las autoridades. Junto a ella, una urna con dos periódicos, una colección de monedas, un CD-Rom sobre el proyecto y un plano.