El administrador único de la empresa Prinsa, Raúl Salgado, confía en un pronunciamiento favorable del Ayuntamiento de Cáceres en la concesión de la licencia de actividad que permita abrir la pista de verano en los terrenos de la antigua piscina de La Cañada. "Si nos dan una respuesta confiamos en que en 10 días hayamos abierto", subrayó ayer Salgado a este periódico.

El responsable del proyecto añadió que ya ha contactado con varios grupos musicales, de teatro y actores cómicos que amenizarán las noches de La Cañada durante las cenas que tienen previsto ofrecer a sus clientes.

Comentó que el pasado lunes recibió del ayuntamiento un informe técnico en el que se le requería una serie de documentos. Salgado remitió entonces al consistorio copia del título acreditativo que permite la ocupación de los terrenos y de los boletines de instalación eléctrica.

También envió la póliza de seguro de responsabilidad civil a terceros, planos de accesos de entrada, salida y capacidades firmados por un ingeniero de caminos y un informe de un arquitecto superior sobre la situación de la instalación a efectos de seguridad y accesibilidad.

EL RUIDO "Todo esto --dijo Salgado-- acompañado de un estudio de las mediciones de ruido emitido por Intromac, centro reconocido por la Junta de Extremadura". El promotor insistió en la viabilidad de los terrenos para desarrollar el proyecto "ya que se trata de suelo urbano calificado como genérico".

Además de este proyecto, al ayuntamiento han llegado cuatro peticiones para instalar pistas en terrenos del ferial. Salgado dijo que los empresarios que están detrás de la cuarta iniciativa --situada en la zona que sirve de aparcamiento en la feria-- pidieron colaboración a Prinsa para la tramitación del expediente. "El problema que tienen es que se trata de suelo rústico calificado como no urbanizable".

Finalmente comentó que el grupo que quiere invertir nueve millones de euros para hacer en La Cañada un centro de ocio está pensando en retirarse por la actitud del vecindario.