La promotora extremeña Prinsa proyecta abrir un geriátrico para 283 plazas en el kilómetro 560,5 de la Nacional 630, frente al Cimov. La iniciativa, incluida en el plan de diversificación de la compañía en otros sectores como una gasolinera en Santiago del Campo o una guardería en Montesol, supondrá una inversión de 1,5 millones en una parcela de 30.000 metros alquilada a los propietarios, que levantaron las instalaciones. Las promotores prevén crear un centenar de puestos de trabajo, de los 64 serán directos y 34 indirectos.

Este nuevo residencial dispone de dos plantas con capacidad para 103 habitaciones --69 en la primera y 34 en la segunda, según el proyecto de Prinsa--, además de 77 plazas de día. Raúl Salgado, responsable de la promotora, detalló que esta empresa ha asumido la terminación de la obra, a la que ha destinado 500.000 euros. A falta de los últimos trámites para obtener la licencia de apertura, será gestionado directamente por Prinsa, que prevé que la tarifa sea de 1.200 euros por persona en estancia completa, "la más barata de los centros privados".

Entre los atractivos con los que contará el centro, Salgado indicó que dispondrá de 30.000 metros cuadrados de jardines con huertos, además de otros servicios como gimnasio. En este listado se incluyen atención médica, enfermería 24 horas, psicológica y social o terapias ocupacionales con actividades físicas, cognitivas, de expresión y comunicación, socioculturales, de artes plásticas o espirituales.

El geriátrico contará también con "una unidad protegida de alzheimer y otras demencias" y servicios no incluidos en la tarifa como peluquería, podología o teléfono. Salgado se mostró confiado en disponer de "antes de dos meses de todos los permisos para poder abrir" y recalcó que quiere implantar otro concepto de geriátrico en el que prime la actividad de los usuarios.

CONTENIDO Con una superficie construida de 3.500 metros cuadrados y los accesos resueltos, el promotor aseguró que "será el más grande que se ha levantado en la ciudad", sin contar los jardines y zonas comunes.

El promotor recordó que en las instalaciones podrán trabajar médicos, gerontólogos, enfermeros, auxiliares, limpiadores, cocineros, jardineros o guardias de seguridad. El proyecto, dijo, no ha contado con subvenciones y ha sido financiado íntegramente con capital privado.