La música llena los escenarios del casco histórico. La clausura del Festival de los Pueblos del Mundo en la plaza Mayor y el estreno del ciclo de conciertos en el Baluarte de los Pozos atrajo a mucho público en la noche del sábado confirmando el acierto de programar ambas convocatorias coincidiendo con el primer fin de semana de agosto.

En el recinto del barrio judío, un auténtico lujo para las noches del verano, actuó Mansaborá Folk, que dejó pequeño el baluarte para demostrar que la música tradicional de la tierra arrastra espectadores allá donde va. Las actuaciones se repetirán durante los sábados de agosto con otros géneros como el humor de Franquete o el rock.

En la plaza Mayor la asociación cacereña de folclore el Redoble volvió a enganchar al público en el cierre de un certamen, referencia en el calendario estival, que en la última noche contó con las demostraciones de grupos de Senegal y México. De nuevo, al igual que en la primera jornada del viernes, los amantes de la tradición respondieron. La música, un valor seguro.