El servicio de la perrera municipal está en serio peligro, hasta el punto de que en menos de un mes podría desaparecer.

La Asociación Cacereña para la Protección y Defensa de los Animales, encargada de la gestión de este servicio municipal, advirtió ayer que lo dejará el próximo día 1 de enero si antes no se firma un nuevo convenio con el ayuntamiento para su mantenimiento, pues la situación, según los responsables de la asociación, "se hace ya insostenible", indicó ayer a este diario su presidenta, Juana García.

Esta decisión, acordada en la reunión que la junta directiva de la asociación mantuvo el miércoles, y que ya se ha comunicado oficialmente al ayuntamiento, lo motiva el hecho de que el actual convenio esta denunciado. Ello debido, recordó la presidenta de la protectora, a la falta de pago por el ayuntamiento de las cantidades adeudadas, que ascienden a más de 50.000 euros.

En este sentido se recordó que se encontraba firmado un convenio por importe de 48.000 euros semestrales de los cuales tan solo se han ingresado 44.709 euros --restan por tanto 51.291 euros--, "no existiendo ni siquiera resolución de la Alcaldía de un reconocimiento de deuda por la diferencia con lo justificado al día de la fecha (30 de noviembre)".

IMPOSIBLE PRIVATIZARLO

Por todo ello, la asociación protectora, insistió su presidenta, no ha tenido otra opción que lanzar dicho ultimátum, o se firma el convenio o el 1 de enero abandonará la instalación de la perrera municipal, "pues no podemos seguir allí de forma ilegal".

Y de llegarse a ello, se hizo constar, la gestión, recogida, traslado, mantenimiento y atención veterinaria de los animales de compañía abandonados en el municipio de Cáceres "será competencia y responsabilidad única del ayuntamiento".

Lo advirtió así la protectora ante la posibilidad de que, de dejar esta asociación la gestión y mantenimiento de la perrera municipal, se pudiera plantear por el consistorio la posibilidad de que se quede con el servicio alguna empresa privada, algo que es imposible.

"La gestión de la instalación de la perrera municipal no se puede conceder a ninguna empresa", advirtió la Asociación Cacereña para la Protección y Defensa de los Animales, pues según recordó "el artículo 24 de la Ley de Protección de los Animales de Extremadura establece que es competencia de los ayuntamientos recoger los animales, bien directamente, bien con asociaciones protectoras o bien con otras instituciones sin ánimo de lucro". Se descarta, pues, que la gestión de las instalaciones de perreras municipales "puedan concederse a ninguna empresa privada".

Ante lo extremado de la situación, la asociación protectora se mostró dispuesta al diálogo para buscar soluciones; dispuesta a negociar con el ayuntamiento un nuevo convenio, aunque eso sí, con una serie de condiciones que para la directiva de la protectora es indispensable tener en cuenta.

CON CONDICIONES

Entre las condiciones que la protectora de animales plantea indispensables para negociar se encuentran el mantenimiento de los actuales puestos de trabajo, sobre los que se recordó hay contratados un trabajador a tiempo completo y cuatro trabajadores a tiempo parcial para dar un servicio de 365 días al año en jornadas de mañana y tarde; así como del mantenimiento del bienestar de los animales a los que se aloja y para lo que se ha de tener atención veterinaria (365 días al año), realización de eutanasias y recogidas de cadáveres (365 días al año) y la alimentación de los animales mediante concurso público.

Sobre estos servicios la asociación indicó que está dispuesta a prestarlos ella misma incrementando su costo en el convenio, sin descartar la posibilidad, "que ya nos planteó en una reunión el ayuntamiento", de que este se haga cargo de ellos "por sí o a través de convenios con la Universidad de Extremadura".

Este diario intentó ayer recabar la postura del ayuntamiento, pero no fue posible contactar con ningún responsable, y desde el consistorio no se respondió a la información solicitada.