La Asociación Cacereña para la Protección y Defensa de los Animales, que hasta enero del año 2012 gestionó la perrera municipal, ha llevado a los juzgados el impago por el ayuntamiento de la subvención que, según afirmó la asociación, se les adeuda del segundo semestre de 2011 con cargo al convenio para el cuidado de los animales y el mantenimiento de las instalaciones de la perrera municipal. Este fue uno de los asuntos abordados en la asamblea que la asociación protectora de animales celebró la tarde del pasado miércoles.
"La demanda se interpuso el pasado año, aunque estamos dispuestos a llegar a un acuerdo; lo único que pretendemos es que se nos pague el dinero adeudado por el trabajo realizado", aseguró ayer Isabel Alcalá, que es la vicepresidenta de la asociación. La cantidad adeudada, según explicó, es de unos 50.000 euros.
Juana García, presidenta de la asociación, comentó ayer que la protectora, pese a no contar con dependencias y haber dejado hace ya más de un año la gestión de la perrera, sigue con su trabajo de recogida de animales, "cien entre perros y gatos" durante el pasado año, añadió García, que agregó que el colectivo sigue con sus actividades de visita a centros de discapacitados y con las charlas en colegios e institutos, "llegando a un millar de alumnos en 2012", aseguró.
La presidenta de la asociación explicó que, aunque no cuenten con instalaciones para albergar a los animales, se sigue trabajando con "casas de acogida", con voluntarios que tienen a los animales en sus domicilios hasta que "conseguimos encontrarles un hogar definitivo".
Otra actividad que sigue desarrollando la asociación es la campaña "para la castración de colonias de gatos", subrayó. García pidió ayer la colaboración ciudadana para que cuando detecten una colonia de gastos en las inmediaciones de sus viviendas contacten con la asociación, que les proporcionará jaulas trampas para recoger a los animales y llevarlos a la clínica veterinaria que colabora con el colectivo para castrarlos, "luego se les suelta", agregó la presidenta, que añadió que "el objetivo es evitar proliferación de camadas por las calles de la ciudad".
