Unos 60 vecinos del Puente de San Francisco se manifestaron ayer en el mismo puente para protestar por la intención del ayuntamiento, según aseguran, de dejarlo dentro de una glorieta con la obra del ensanche Mira al Río-San Roque. Defienden que, aunque el puente no tiene valor histórico por su escasa antigüedad, es la seña de identidad del barrio.