Convocaron la protesta por su grupo de whatsapp y se reunieron con sus mascotas en el parque Ronda, en Mejostilla, cuya área canina pretende reducir el ayuntamiento después de las quejas de los residentes por ruidos. Ana Isabel Bermejo, una de las usuarias participantes en el acto, explica que la zona a la que los llevará el ayuntamiento es la peor del recinto. «Nada más entrar hay una hondonada, cuando llueve se llena de agua y de barro y se convierte en un lugar impracticable». Los manifestantes no entienden por qué el consistorio no les cede la zona mejor del parque, donde hay árboles y bancos y es menos inhóspita. «Si hay que partir el parque porque hay que respetar el descanso, pues que al menos arreglen la zona que nos van a ceder», sostienen.

Sin fuentes

Los dueños de los perros critican, no obstante, el estado general del espacio. «No se recogen las papeleras a diario y huele muy mal. Es asqueroso, el olor de las cacas es insoportable, hay veces que tenemos que colocar bolsas de basura sobre las papaleras para paliar los olores», aseguran los afectados. Añaden que «los bancos no son los adecuados porque tienen las tiras tan finas que si un perro se apoya se puede romper una pata. No hay fuentes para que los perros beban, tenemos que llevar botellas para que lo hagan. No es normal que un parque canino esté en esas condiciones, y más ese, que está muy concurrido de mascotas», concluyen los dueños.

El ayuntamiento respondió ayer a este asunto a preguntas de El Periódico Extremadura. «El uso seguirá siendo el mismo que hasta ahora, lo que se ha hecho es una reordenación cambiando el acceso y la zona de descanso (bancos). La parcela, en una de las zonas, está próxima a las viviendas y los vecinos de esas viviendas habían presentado quejas por el ruido que generaba el área canina», apuntó.

El equipo de gobierno aclaró: «Lo que se hace ahora es cambiar la entrada y la zona esa de descanso para que esté más retirada de las viviendas y así favorecer la convivencia tanto de unos como de otros. Los dueños de mascotas siguen teniendo un sitio para sus animales, pero dejando más distancia con las viviendas para no generar ruidos. Ese es el motivo de la reordenación que se ha hecho. Unos vecinos piden una cosa y otros otra», concluyeron las fuentes consultadas. Cáceres cuenta con casi una decena de áreas caninas.