La idea nació hace 22 años (en 1994, aunque no llegó a salir adelante), ha tardado alrededor de 16 meses en levantarse (de abril del 2015 a ayer) y ha superado más de una polémica (grietas, talas de árboles, vertidos...) pero, finalmente, el parking subterráneo de Primo de Rivera, que funcionará las 24 horas del día, fue inaugurado ayer oficialmente y hoy abrirá sus puertas en una jornada en la que será gratuito aparcar.

Desde la construcción de la Ronda Norte, la del aparcamiento subterráneo es la inversión de mayor envergadura que se ha acometido en la ciudad. La faraónica obra se inició después de que la empresa Empark presentara en 2011 al ayuntamiento un estudio de viabilidad del parking, cuya construcción finalmente fue adjudicada al grupo de empresas sorianas Riosa-Herce.

Así, las obras, que se han demorado alrededor de 16 meses, comenzaron en abril del 2015 con las primeras tareas de medición topográfica y el corte de uno de los carriles de circulación. Tras ello, se procedió a la retirada del mobiliario de la zona (bancos, papeleras...) y el desvío de servicios (electricidad, gas, telefonía...) antes de que la maquinaria hiciera aparición en Primo de Rivera por mayo.

Las excavaciones, con el correspondiente corte al tráfico en toda la avenida, se iniciaron en julio, después de que se trasladaran las paradas de autobuses afectadas (líneas 1, 2, 3, 4, 5, 7, 8, 40, Campus y Refuerzo Campus) y de taxis a Virgen de Guadalupe, lo que provocó la eliminación de casi un centenar de aparcamientos en la vía pública.

Tala de árboles

Asimismo, el colectivo Cáceres Verde trató de impedir, recogiendo casi 1.500 firmas, la tala de árboles en Primo de Rivera, aunque finalmente no lo consiguió. El histórico cedro, no obstante, no fue talado sino trasplantado de la avenida al parque del Príncipe, aunque murió durante el proceso y hace escasos días fue retirado.

Con las excavaciones en marcha, la Asociación Extremeña de Plantas de Residuos de Construcción y Demolición (Asorex) denunció que vertidos de la obra estaban siendo dejados en una parcela de titularidad municipal en la Mejostilla, mientras que comunidades de vecinos hicieron lo propio debido a las grietas que aparecieron tanto en edificios de viviendas como locales comerciales. Esto provocó que la obra sufriera algunas paralizaciones en noviembre y diciembre, aunque finalmente la Fiscalía archivó ambas denuncias.

En marzo de este año, el parking comenzó a ver la luz de nuevo y en mayo volvieron a circular los coches por dos de los cuatro carriles de la avenida, que fue reabierta al tráfico en su totalidad el pasado 19 de julio.

Finalizada la obra, Primo de Rivera ya está preparada para acoger los cerca de 20.000 vehículos que circulaban a diario por ella antes de la construcción del parking y las líneas de autobuses trasladadas volverán a su lugar original, junto al Múltiples. Los cacereños y los turistas tienen parking para rato.