Los once concejales del grupo socialista abandonaron ayer el pleno de la corporación municipal antes de la finalización de la sesión. Es la primera vez durante el mandato de José María Saponi que un grupo político entero deja el pleno como medida de protesta. La portavoz del PSOE, Carmen Heras, acusó ayer al alcalde, José María Saponi, de "autoritario" y de tomar decisiones que incumplen la legislación de régimen local, una crítica que extendió al secretario del ayuntamiento por avalar "la actitud llena de ignorancia del alcalde". El portavoz del gobierno, Andrés Nevado, exigió a Heras una rectificación pública por "haber insultado de manera grave al presidente de la corporación y alcalde".

El origen de estas acusaciones estuvo en la enmienda presentada por el PP a una proposición del PSOE contra la violencia de genero. Heras rechazó esa enmienda y se opuso a la intención de Saponi de que se votase, asegurando que no era correcto, "por no decir que sería ilegal". Saponi, tras hablar con el secretario, siguió adelante. Heras le pidió que recapacitase. A lo que el alcalde respondió que la votación se ajustaba a la legalidad. La enmienda se aprobó y los once concejales del PSOE no votaron.

Heras solicitó entonces la retirada de la proposición socialista antes de proceder a su votación. El alcalde le recordó que no podía intervenir porque el proceso de la votación ya se había iniciado y que ya no podía retirarse. La portavoz insistió, y Saponi le llamó la atención en dos ocasiones. Al final, se aprobó con los votos del PP e IU, mientras que el PSOE no votó su proposición.

CRITICA AL SECRETARIO Esta situación volvió a repetirse unos minutos después, durante el debate de una proposición de IU, en la que se pedía que se investigase y juzgase el asesinato del cámara José Couso. El portavoz adjunto del PP, Javier Castellano, quiso presentar una proposición alternativa. Saponi aseguró que no era posible, pero que sí se podía presentar una enmienda, que pasó a votarse junto con la proposición de IU. El PP votó a favor de la enmienda, y en contra de la proposición. IU, al contrario. Y el PSOE no votó. La enmienda se aprobó, mientras que la proposición que la motiva, no.

Antes de acabar el pleno, Heras denunció que se habían conculcado los derechos de su grupo y anunció que se marchaban. En ese momento, el alcalde ya no estaba, minutos antes había salido --ayer tenía una reunión de la Femp en Madrid--, y Andrés Nevado presidía la sesión.

Heras justificó la decisión de su grupo de no votar porque "no participamos en esta perversión del juego político". Aseguró que el PP intentaba con la enmienda "boicotear" una proposición en defensa de la mujer, "será porque son hombres", agregó refiriéndose a los máximos responsables del equipo de gobierno, y explicó que las enmiendas deben presentarse por escrito antes de iniciarse el debate. Agregó que el grupo proponente puede aceptar o rechazar la enmienda, y que lo que se vota es la propuesta. Calificó de "grave" la actitud del secretario. Y comentó que el PP "se sacó de la manga" que primero se votase la enmienda y luego la proposición, "una aberración" realizada con la colaboración del secretario, dijo.

LAMENTAR LO OCURRIDO Nevado recordó que no es la primera vez que Heras se opone a enmiendas en las que se pide a la Junta un mayor compromiso con la ciudad, "se muestra reacia, y es lo que provoca su postura". Defendió la legalidad de las decisiones adoptadas por el gobierno, y anunció la redacción de un informe que lo corroborará. Afirmó que el abandono del pleno fue fruto de "una pataleta política" y que supone "un agravio" a los ciudadanos.

Casco lamentó lo ocurrido, e insistió en la necesidad de reformar el reglamento de funcionamiento interno para que estas situaciones no vuelvan a darse.