Los 44 extrabajadores de Waechtersbach que pretendían crear una nueva fábrica de cerámica ya saben cuál es la postura del PSOE extremeño y de la Junta a este respecto: "Ese proyecto no tiene posiblidades de sobrevivir, no tiene ninguna viabilidad".

Así de contundente se mostró ayer el diputado regional del PSOE Félix Dillana durante el Pleno de la Asamblea de Extremadura, un foro en el que el parlamentario dejó claro que la Junta no va a respaldar el proyecto impulsado por los extrabajadores porque en sus actuales términos "no tiene futuro".

Dillana explicó que la situación de esta fábrica "es irreversible y no tiene solución", algo que, a su juicio, "sabemos todos". El diputado socialista insistió en que se trata de un proyecto "sin ninguna viabilidad y sin posibilidad de sobrevivir", entre otras cosas porque "tiene máquinas obsoletas" y a estas alturas no tiene la confianza ni de la banca ni de los proveedores.

En cuanto al apoyo del Ejecutivo regional a los exempleados de la fábrica, resaltó que se les respalda "igual que al resto de los trabajadores", por lo que la Junta les "acompañará" si presentan un proyecto viable. Sobre la actitud que deben tomar tanto el PSOE como el Gobierno regional con los extrabajadores de la planta, también lo tiene claro: "Animarles es desleal, porque eso no tiene futuro".

Es la primera vez que los socialistas se pronuncian de una forma tan clara sobre este asunto. Hace cerca de cuatro meses el presidente de la Junta Juan Carlos Rodríguez Ibarra, recibía a los representantes de los afectados. En esa reunión el presidente regional les garantizó el apoyo público, de forma que el Ejecutivo aportaría el 49% del nuevo proyecto a través de Sofiex si éste era viable. Pero parece que el PSOE ya tiene claro que la iniciativa no es viable.

Desde IU-Siex, el diputado José Antonio Jiménez, que defendió una propuesta para instar a la Junta a que apoye las iniciativas de los exempleados de la Waechtersbach, acusó a Dillana de ser "un enterrador de ilusiones" y criticó que la Junta tenga "miedo de que el problema llegue a las elecciones".

En su moción IU-Siex instaba a la Junta a "establecer una línea de contactos permanente" con estos trabajadores. También a colaborar con la plataforma de empleados que se ha creado y a llevar a cabo los estudios de mercado o de viabilidad que sean necesarios, además de facilitarles cursos de formación.

La diputada del PP Teresa Bravo pidió a la Junta "un mínimo esfuerzo para solucionar el problema" y se preguntó como "no hay alguna solución sobre la mesa" cuando se cuenta con herramientas como la Consejería, el Sexpe o el Plan de Empleo.