El portavoz socialista Luis Salaya y la concejala Belén Fernández criticaron ayer que el gobierno (PP) haya decidido transformar una plaza de subinspector de la policía en otra de técnico de administración especial para que sea el jefe de uno de los dos servicios de Urbanismo. Recordaron que la policía había pedido que la plaza se transformase en dos de agentes y que sin embargo se ha destinado a Urbanismo para atender el pacto del gobierno con C’s para aprobar el presupuesto, acuerdo que recogía la reordenación del área de Urbanismo.

Fernández precisó que la policía pidió las dos plazas de agente por la previsión que hay del número de efectivos que pueden estar en segunda actividad a final de 2017. Ahora hay 146 en activo y 14 en segunda actividad. A final de 2017 se puede llegar a 25, un 15% de la plantilla. Añadió que esta modificación y otras (transformar una plaza de técnico superior de Deportes en otra de arquitecto, la reclasificación de la plaza de jefe de gabinete de la alcaldía y el traslado a la UP de la plaza de una trabajadora del Imas) se han hecho sin la negociación a la que obliga la ley.

El gobierno respondió que en la última mesa de negociación, la pasada semana, se aprobaron las bases de 8 plazas de policía (dos de inspector -una de turno libre-, 3 de agente -por oposición libre- y 3 de oficial -de promoción interna-) y que recientemente se ha reforzado la flota de vehículos.