Ojo avizor, el concejal de Vox, Teófilo Amores, se ha convertido en un notario incansable de lo que a su juicio son atropellos que se cometen en la ciudad monumental de Cáceres. Ayer lo hizo sacando a la luz una fachada en el Pasaje de Santa Ana, donde denunció que una empresa de telefonía hace «lo que le da la gana, no respetando ni siquiera mínimamente ni los monumentos, ni los edificios, ni la estética. Una pena».

La imagen, que Amores publicó en su red social de Facebook, hizo reaccionar al concejal de Turismo, Jorge Villar, que espetó: «¡Qué chapuza, por favor! Pero no sé si esas cajas no son del propietario del inmueble. Lo de cables, cajas, antenas... en nuestra ciudad monumental es para mirárnoslo. Qué retraso. ¡Buen día Teofilo!», concluyó el edil.

Siguió una oleada de mensajes; uno de ellos, este: «Teofilo, creo que llevas razón; es más, hay una normativa de ordenanza municipal para estos casos en los que a veces estás obligado a aperturas de zanjas para no dejar a la vista ciertas instalaciones de suministro y que a las constructoras no les pasan ni una. Efectivamente no es incompatible el decoro con las nuevas tecnologías».

Amores aprovechó entonces para destacar la figura del exalcalde Alfonso Díaz de Bustamante, del que dijo: «Hizo un esfuerzo ímprobo para que se ocultaran los cables que había en la ciudad monumental. Entonces las autoridades municipales obligaron a las compañías suministradoras a actuar en consecuencia. Después del señor Bustamante, las compañías han vuelto a campar a sus anchas. No hay ni normativa municipal exhaustiva al respecto ni vigilancia».

Ahí no quedó la mañana. Minutos después, en el foro Fotodenuncia Cáceres se denunciaba el ataque a una señal de tráfico en la calle Colón. Otra chapuza, sin duda.