La filosofía está en todo. Es todo. La vida misma. Quien piense que solo sirve para vivir encerrada en los libros no ha entendido nada. Está en cada rincón. Por si acaso de vez en cuando hay que sacarla a la calle para que coja aire y para que los que no llegan a los libros también tengan la oportunidad de llegar a los pensamientos de otros. Eso ha pensado el colectivo artístico local Cromatica Crew, que reparte desde hace tiempo frases célebres que se encuentran al paso en las señales de la capital cacereña.

Jean-Paul Sartre, Simone de Beauvoir, Judith Butler o Platón. Sentencias de los principales pensadores de la historia que se puede encontrar uno cuando camina por la calle. Lo que habitualmente pasa desapercibido para el peatón se convierte en una opción artística para el colectivo cacereño, que mantiene el anonimato, porque aunque en apariencia inofensivas, sus acciones afectan al mobiliario urbano y pueden desembocar en consecuencias legales. Ser anónimos es el precio que pagan por hacer arte de guerrilla, un movimiento de arte urbano con el que reinventan los espacios cotidianos para transformarlos en lugares donde hacer reflexionar, pero prefieren que sea así. «Nosotros no importamos, importa la música, la felicidad, el arte y la filosofía». A pesar de conservar identidad en secreto, este diario ha charlado con los artistas sobre su singular propuesta.

Curiosamente, según relatan, la iniciativa nació por azar. «Empezamos poniendo pegatinas de nuestro logo y frases que nos hacían gracia, trocitos de canciones que nos gustan, las frases de personajes ilustres surgieron porque uno de nosotros está muy metido en el tema de la filosofía». En este caso, el propósito es «acercar ideas a la gente que le puedan hacer pensar o simplemente sonreír, que estamos un poco aletargados y tristes». «Queremos acercar un poco de cultura y diversión a la gente que pasea por la calle. Y mucha filosofía porque si nos quitan la filosofía de las aulas, habrá que sacarla a la calle».

Aseguran que la selección de las frases se hace «simplemente leyendo a los autores y seleccionando frases que consideramos potentes». «Hay autores muy significativos que tienen muchísima importancia en la teoría del conocimiento, pero no los incluimos por considerarlos malas influencias sociales, un poco a gusto del consumidor y de las reivindicaciones que hacemos».

Sus próximas acciones también mantendrán la misma línea. «Es una forma de protestar sin molestar, ni agredir» para «seguir acercando nuestra manera de ver la vida a los demás y quejarnos de las situaciones de injusticia que vemos». De momento, seguirán repartiendo pegatinas de Sartre en cualquier sitio. «Donde vamos llevamos pegatinas, da igual la ciudad y el país». Habrá que fijarse en las señales.