Uno de los asuntos que se iban a empezar a tratar ayer en la comisión de Contratación y Economía era cómo se trasladará la subida del agua a la tarifa, que tiene hasta ocho tramos en la tasa del agua. En el primero se premian los consumos bajos con un precio más barato, mientras que del tramo tercero al octavo se paga más por los mayores consumos. Además, la tasa del agua tiene una cuota fija y otra variable (por metros cúbicos consumidos) y lo mismo ocurre con la tasa por el alcantarillado, a la que también afecta el contrato, que es por el ciclo integral (abastecimiento y depuración).Otra de las medidas que se han planteado con este nuevo contrato de concesión es que el parque de contadores pase a ser público, con lo que se persigue tener un mayor control de los consumos reales.Aunque el anteproyecto de explotación parte de una hipótesis con incrementos del 35% en las cuotas variable y fija de la tasa del agua, en otra propuesta que está dentro del expediente se pone un tope máximo a la subida, que en el caso del agua no podrá experimentar inicialmente un incremento superior al 51,3%, lo que equivale a un precio por metro cúbico (mil litros) de 1,15 euros, mientras que en la tasa de alcantarillado es de un 92%, lo que equivale a 48 céntimos por cada metro cúbico.