--¿Cómo está su relación actual con Santiago Pavón y Felipe Vela?, ¿les ha pedido calma tras sus declaraciones públicas de octubre y noviembre?

--Sí les he pedido cierta discreción, que no tiene nada que ver con hablar o no, porque no me preocupa la continuidad de los pactos, lo que a mí me preocupa es la imagen, y si la imagen que se da es de desorden, todo el mundo piensa que existe un desorden en el gobierno municipal. Somos fuerzas políticas muy diferentes, pero los pactos fueron medidos y pensados. Los tres partidos tienen derecho a que se vea qué hacen y a veces, por esa falta de experiencia en el trabajo conjunto, se da la impresión de que esto es una algarabía, pero es una forma de expresión, de decir que estamos aquí, mas que de desorden o crisis en los pactos. Hay gente a la que le gustaría que esto fracasara porque significaría que la derecha vuelve. No hay crisis, lo que sí es verdad es que se hace camino al andar y cualquier relación hay que mejorarla.

--¿Cuándo habrá un nuevo cruce de declaraciones?

--No lo sé, no tengo una bola de cristal. Como en cualquier relación humana, un estallido no se puede prever, pero vamos a poner toda una serie de recursos para que esto no suceda. Quizás faltó en algún momento una relación más fluida, por eso los lunes, con Santiago, y los martes, con Felipe, se mantienen reuniones. Espero que cada vez nos conozcamos mejor y podamos tirar para adelante con todo lo que nos une.