En solo siete meses, de enero a julio, las voluntarias de Red Madre en Cáceres ya han ayudado a medio centenar de embarazadas que sufrían problemas de distinto tipo. Durante los últimos años, gran cantidad de mujeres han llegado a las puertas de la asociación desde un contexto de total vulnerabilidad y riesgo psicosocial, planteándose en muchas ocasiones el aborto por no contar con los recursos necesarios para criar a sus hijos. Ellas, las voluntarias, acaban actuando como red de seguridad, como un equipo de salvamento, como un auténtico grupo de rescate para las embarazadas.

Este diario ha profundizando en la labor del colectivo para conocer su trabajo solidario. Algunas de las mujeres que acuden a Red Madre proceden de familias desestructuradas y viven en un clima hostil. Muchas otras pertenecen al tipo de "familia endeudada": solían tener su trabajo y su vida normalizada, pero ahora lo han perdido todo. Algunas incluso han sufrido violencia de género. Red Madre se esfuerza por corregir esta situación y desde enero, sin ir más lejos, ha ayudado a 53 mujeres, de ellas 35 españolas, la mayoría con una edad comprendida entre 18 y 25 años. El resto procede de Centroeuropa, Africa o Sudamérica.

El colectivo sacará ahora a la luz tres nuevos proyectos, reunidos bajo el título Madres 2013 , que prevé una ayuda triple: material, social y psicológica.

El primer proyecto, de ayuda material, se realiza en colaboración con la Fundación Valhondo. Han recibido 1.500 euros, con los que se buscará cubrir las necesidades básicas de la madre y el bebé: la compra de pañales, leche de continuidad o cuidados físicos. El objetivo se ha fijado en repartir la ayuda a 100 niños en Cáceres desde marzo a diciembre. Los criterios para la asignación serán los ingresos de la madre, la cantidad de hijos, si tiene vivienda hipotecada, si recibe otras subvenciones, etc.

El segundo proyecto, de apoyo social, está respaldado por la Diputación de Cáceres, que ha concedido a la asociación 3.000 euros para este fin. Actualmente ya hay 16 mujeres participantes. La colaboración social de Red Madre se basa en proporcionarles acogida y atención individualizada, acompañar a las madres durante su embarazo y realizar un seguimiento una vez han dado a luz. Con este proyecto se prevé ayudar a 40 mujeres.

La labor social que realizan las voluntarias cada día resulta gratificante, según Ana Isabel Lara, coordinadora de acompañamiento: "Da mucha satisfacción, es precioso servir de apoyo a tantas mujeres. Te conviertes en partícipe de sus vidas y del nacimiento de sus hijos", revela.

El tercer proyecto ofrece apoyo psicológico, tanto para la madre como para la mujer que decide abortar. Desde la asociación, la psicóloga Carmen González Rivas destaca la importancia de este seguimiento. Han recibido casos de bebés con problemas en la gestación causados por el mal estado de salud de la madre, la falta de alimentación, el estrés y la angustia que provoca la precaria situación económica, no contar con apoyo familiar o la ausencia de pareja.

Desde Red Madre insisten en que el foco se pone en la mujer independientemente de si decide abortar o no. Afirman que hay mujeres que tienen muy clara su decisión, pero otras dudan, al estar en un clima desfavorable para el embarazo inesperado. "Las circunstancias que provoca la crisis hacen que algunas se vean abocadas a plantearse el aborto", declara Pilar Javato, presidenta de la asociación. "Respetamos su decisión. Lo que da la libertad de elección es la información, y ahí es donde entra Red Madre. Queremos que sepan que no están solas". Javato añade que el fin último del colectivo es "darle valor a la maternidad, que se afronte como algo positivo, que no se discrimine a las madres".