El concejal de Fondos Estratégicos, Javier Castellano, anunció ayer que la reforma del edificio Embarcadero estará concluida a finales de este año. Las deficiencias detectadas en la estructura de la bóveda han obligado a retrasar la que se concibe como una de las principales actuaciones de esta legislatura, cifrada en cuatro millones de euros y a los que habrá que añadir otros 500.000 (unos 84 millones de pesetas), necesarios para subsanar los fallos en la cubierta de lo que se pretende convertir en un centro formativo, cultural y medioambiental.

Castellano dijo que la recuperación de la cubierta, sin duda la parte más atractiva del edificio situado en el poblado minero de Aldea Moret, "está ejecutada en muy buena proporción". Esa cubierta consta de un total de 18 pilares y entre cada uno de ellos existe una losa de hormigón o membrana. Dos de esas membranas se tuvieron que demoler por problemas de seguridad y actualmente se están reponiendo. Estos trabajos se compatibilizan con las tareas de excavación.

Los problemas de seguridad en la estructura de la bóveda fueron detectados el pasado mes de enero. Este hecho obligó a paralizar los trabajos y a realizar un estudio técnico, que ejecutó la empresa Vorsevi, una sociedad de ingeniería y control de calidad. El proyecto del Embarcadero se ejecuta con fondos europeos del programa Urban en un 75%, el 25% restante lo aporta el ayuntamiento. La obra se adjudicó a finales del año 2003 a la empresa Placonsa.