La Subdelegación del Gobierno de Cáceres negó ayer que el retraso de la nueva pasarela peatonal, que el ayuntamiento quiere instalar entre los barrios de Santa Lucía y La Cañada, se deba a la falta de un permiso de Renfe para que se puedan iniciar las obras. El concejal José Joaquín Rumbo aseguró la semana pasada que el paso elevado aún no se ha podido colocar porque Renfe no ha dado la autorización necesaria para esta actuación.

Sin embargo, las explicaciones ofrecidas ayer por la compañía ferroviaria con documentación escrita revelan que el responsable de que no se hayan iniciado las obras es el propio ayuntamiento. Según Renfe, el consistorio no ha contestado aún a una petición remitida el 4 de octubre del 2004 en la que se le insta a subsanar varias anomalías detectadas en el proyecto presentado por el equipo técnico del plan Urban Calerizo, con cuyos fondos tiene previsto financiar el ayuntamiento la nueva pasarela.

La instalación del paso elevado se incluye dentro de las actuaciones para la adecuación del edificio Embarcadero y su entorno. La pasarela tiene como objetivo salvar el trazado del ferrocarril y en su columna de apoyo está previsto ubicar una torre fotovoltaica asociada al resto de instalaciones del Embarcadero.

A pesar de ello, la Jefatura Territorial de Renfe en Mérida considera que la propuesta de pasarela peatonal "no cumple la altura mínima sobre cabeza de carril" y añade que "la torre fotovoltaica como el apoyo de la pasarela estarían junto con el cerramiento dentro de la propiedad de Renfe". Asimismo, la compañía precisa que el cerramiento previsto "tanto por el lado de la nave a rehabilitar como por el lado contrario deberá de ser del tipo exigido por Renfe" y solicita al ayuntamiento que aclare la longitud de ambos lados con el fin de instalarlo al límite de los terrenos de Renfe. El escrito aclara que las obras no podrán autorizarse hasta que no se modifiquen estas anomalías.

ANTECEDENTES La primera petición municipal para instalar la pasarela data del 25 de agosto del 2004 en la que solicita a Renfe información sobre incidencias y distancias de seguridad en las vías que cruzan la pasarela. Renfe respondió dos días después solicitando datos de estructura, cálculos y gálibos de la pasarela así como las características de rehabilitación de los edificios.

El subdelegado del Gobierno, Fernando Solís, confirmó ayer a este diario que Renfe intentó contactar ayer, sin éxito, con el concejal José Joaquín Rumbo y aseguró que responsables de la compañía ferroviaria están dispuestos a mantener una reunión con el edil para que se puedan iniciarse las obras de la nueva pasarela. "Ahora la pelota está en el tejado del ayuntamiento", indicó Solís, quien ayer se encargó personalmente de las gestiones para que la reunión entre ambas partes se pueda celebrar. En este sentido, indicó que "visto el problema y la demanda de los ciudadanos de Aldea Moret, queremos celebrar una reunión en Cáceres con los técnicos de Renfe de Mérida y Madrid y el ayuntamiento para poder solucionar los problemas técnicos", aunque dejó claro que debían haber sido los responsables del Urban Calerizo "los que tenían que haber respondido ya a la petición de Renfe".