Los hermanos Juan Antonio e Iván Cortés llevan vendida este invierno el doble de leña que años anteriores. Su precio es más competitivo que otras fuentes de calor para el hogar. También aseguran que han repuntado las peticiones de picón, relegado a muy pocas viviendas en los últimos tiempos. De hecho, los viejos braseros "se están utilizando incluso en Cáceres capital, aunque parezca exagerado", explican desde la Asociación de Consumidores y Usuarios Acuex, que en su balance de 2012 llama la atención sobre los recortes que ya realizan las familias en los suministros del hogar. Las facturas de electricidad, gas o gasoil se han puesto cuesta arriba con el paro, con la hipoteca, con la cesta de la compra... Hay que meter la tijera y muchos optan por limitar o apagar la calefacción.

"La crisis parece no tocar suelo en lo que respecta al ciudadano corriente, y agudiza la tendencia a recortar gastos", explica Rosa González, presidenta de Acuex. Los usuarios comenzaron reduciendo todo lo relacionado con el ocio, "pero la situación económica persiste y en este momento los consumidores extienden los recortes a todos los sectores del hogar, y principalmente a los suministros básicos. Se intenta disminuir el gasto en gas y electricidad, y no son pocos los hogares extremeños que, aún disponiendo de gas ciudad, han vuelto a la bombona de butano para uso doméstico (cocinas y estufas)", subraya.

400.000 KILOS DE LEÑA Juan Antonio e Iván, propietarios de Leñas Hermanos Cortés, así lo confirman. Trabajan desde Aliseda para la capital cacereña y todos los pueblos del entorno, pero sus clientes ya se extienden hasta el Valle del Jerte. A estas alturas de invierno han vendido 400.000 kilos de leña, frente a los 250.000 de otros años. Ambos trabajaban solos hasta que el volumen de pedidos de los últimos meses les animó a contratar mano de obra, y ahora mismo son ya seis empleados. Pasan el día cortando y repartiendo con su camión y sus remolques. "El precio de la leña está entre 9 y 10 céntimos el kilo. No tiene competencia", explican. Muchos hogares han vuelto a poner en marcha antiguas chimeneas y han desempolvado las estufas.

Pero además, los dos hermanos también fabrican picón. Lo han hecho siempre de la forma tradicional: con leña de encina y de forma ecológica, sin aceites ni tractores que al final acaban arrastrando piedras. Lo venden por sacos de 40 kilos a 4,50 euros, y el repunte en las ventas ha sido considerable. "Este invierno llevaremos unos 500, porque además mantenemos los precios desde hace cuatro años", explican. Basta con mirar el largo listado de piconeros de la provincia que aparecen en internet.

¿Y el butano? Con la bombona a 16,32 euros en estos momentos, vuelve a ser una opción para el ahorro porque además permite ir controlando el consumo. Las estufas en dormitorios y salones están sirviendo de sustitutivo parcial a la calefacción central, incluso las viejas cocinas de butano relegadas a un segundo plano se han recuperado en algunos hogares. Sin embargo, la venta de bombonas comenzó a caer hace unos años, a raíz de la llegada del gas natural, y sigue cediendo. "Quizás esta posible vuelta al butano esté amortiguando el descenso, pero lo cierto es que las ventas en Cáceres fueron en 2012 menores que en 2011. Hay familias que no tienen para comprar siquiera la bombona, o que retrasan su reposición hasta que tienen dinero. Hemos registrado muchas bajas, aunque también más altas", indica José Antonio Agudelo, director general de Nevasa en Cáceres.

El butano tiene algunos inconvenientes, por ejemplo el espacio que ocupa o la necesidad de llamar al repartidor cuando se agota. Por ello, el gas natural le ha ganado terreno. Sin embargo, en tiempos de crisis ofrece una ventaja muy importante: no hay que pagar un mínimo y el usuario gasta lo que consume, no más. Incluso es posible calentar una sala de 20 a 40 metros con una bombona durante un mes. "De hecho, algunos restaurantes y bares están prescindiendo de otras energías y se pasan al butano. Les vendemos las estufas. La situación actual no es de lujo para nadie", señala el director.