El traslado de la movida desde la plaza Mayor al ferial ha generado una mayor concentración de jóvenes. Así lo atestiguan los servicios de Conyser, que recogen una media de 3.300 kilos de basura por noche en este recinto. De hecho, se ha convertido en el espacio que requiere el mayor operativo de limpieza de todo el año. "Tenemos instalados 23 contenedores, pero se utilizan poco y ni mucho menos se llenan. Los usamos posteriormente para realizar la recogida", explica el responsable de operaciones de Conyser.

Los jóvenes tampoco se percatan de que el trabajo de los empleados es más duro en el ferial, ya que el espacio está abierto y las bolsas vuelan hasta los campos del entorno. Además, la empresa sólo puede aplicar el baldeo a la avenida principal, porque el resto de las zonas son de tierra y deben limpiarse "a cepillo y mano".