El comercio más tradicional de Cáceres no sólo está en Pintores, San Pedro o Moret, las tiendas de las calles Roso de Luna y Donoso Cortés también existen. Y para llamar la atención sobre esta evidencia todas se han unido para celebrar la Navidad con dos festejos e invitar a todos los cacereños a que las conozcan. "Estamos aquí un poco aislados del eje principal porque estas calles tienen menos paso de gente y es una forma de reivindicar que existimos, que estamos aquí, porque muchos cacereños ni lo saben", explica Mariví Mateos Cobos.

El primero de estos festejos será el día 22. Ese día, desde las 18.30 al cierre de las tiendas, un Papá Noel repartirá a los niños que visiten la calle una bolsa de golosinas --se han preparado 200 de estas bolsas-- y se sortearán 18 juegos de futbolines. Y el día 24, llevarán a cabo una comida de fraternidad entre los comerciantes en plena calle.

Esta última iniciativa no es nueva. Hace ya tres años que los empresarios de este eje comercial dan prueba en Navidad de que, lejos de ser competencia, son compañeros. "Somos pocos, pero muy bien avenidos", comenta Pepe Cantero.

Así, esto de reunirse a comer para celebrar la Nochebuena surgió de forma "espontánea". "Cada uno trae de su casa un plato, compramos entre todos bebidas y luego lo compartimos a la hora del cierre de nuestros negocios. Este año hemos puesto un poco de dinero más casi todos para las golosinas y el Papá Noel para nuestros clientes", relata Mateos.

Entre ambas calles suman alrededor de una treintena de pequeños comercios y entre todos ofrecen una variada oferta para las compras: joyería, moda, estética, alimentación regional, zapatería, complementos... Algunos no solo son históricos de la calle sino de todo el eje comercial de la zona centro, como modas Villegas.